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Presunción de inocencia en la Santa Sede

Uno de los principios de la justicia es la presunción de inocencia… | Fred Álvarez Palafox

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Escrito en OPINIÓN el

El cardenal francés Philippe Xavier Christian Ignace Marie Barbarin, arzobispo de Lyon, anunció el pasado jueves 7 de marzo su decisión de dimitir al cargo una vez que un tribunal penal de primera instancia lo condenara a seis meses de prisión presumiblemente por no denunciar los abusos sexuales del sacerdote Bernard Preynat, que sirvió en la arquidiócesis de Lyon hasta el años 2015. Hasta el momento Preynat no ha sido juzgado.

El tribunal correccional de Lyon -presidido por la jueza Brigitte Vernay- condenó al purpurado sin prueba contundente a seis meses con exención (es decir, exonerado de todo cargo) por no haber denunciado los abusos sexuales que el sacerdote Bernard Preynat cometió contra varios scouts menores de edad durante las décadas de los años setenta y ochenta.

¡El golpe aunque simbólico fue durísimo para la iglesia católica francesa!

El diario español La Vanguardia señaló que “la condena ha llegado como una sorpresa, ya que la fiscalía no solicitó ninguna pena contra Barbarin por considerar que una parte de los hechos había prescrito y que no estaba demostrado que hubiera intención de ocultamiento”.

De inmediato la defensa apeló la sentencia del tribunal al considerar que la decisión de la jueza fue injusta.

En ese momento que recibió la noticia el purpurado afirmó su decisión de ir al Vaticano a ver al Santo Padre para presentarle su dimisión al cargo...

“Después de la decisión del tribunal, independientemente de mi destino personal, me parece importante insistir antes que nada en la compasión por las víctimas y todo el sitio que ellas y sus familias tienen en mis oraciones”, declaró Barbarin después del veredicto y añadió su decisión de “ir a ver al Santo Padre para entregarle mi dimisión…”.

La decisión de presentar la renuncia al Papa tiene que ver con la diócesis: piensa, en conciencia, dimitir por el bien de la Iglesia de Lyon, dijo el vocero del cardenal y obispo francés Emmanuel Gobilliard; además “es también un ciudadano francés, tiene derechos y los abogados creen que (con la sentencia de condena por no haber denunciado, ndr.) habrá consecuencias para el derecho, para la jurisprudencia; hay una nueva interpretación del derecho”.

Y como fue. El Papa recibió al cardenal en una audiencia privada la mañana del lunes 18 de marzo. 

En ese día la Oficina de prensa de la Santa Sede sólo hizo mención de la reunión que tuvo lugar a puertas cerradas y sin periodistas; empero la reunión generó ruido y se especuló que la decisión papal podría haber sido que le aceptará de inmediato su dimisión y nombrará a otro prelado en su lugar y dejar contentas a las organizaciones de víctimas, o quizá posponer la decisión hasta que se haga pública la sentencia del Tribunal de Apelación y nombrará a un administrador apostólico.

Pero no fue así, la decisión del Papa un día después fue de no aceptar la renuncia de Barbarín como Arzobispo de Lyon, invocando el principio de presunción de inocencia...

Bastaba ver la imagen que se difundió de la reunión privada, Francisco se fotografió sonriente con él y estrechando su mano.

Alessandro Gisotti, vocero papal, dijo que Francisco dejó al integrante del Colegio Cardenalicio la libertad para tomar la decisión que creyese más oportuna y pensando en el bien del arzobispado.

La tarde del martes el purpurado francés emitió un comunicado oficial informando de la reunión con el papa jesuita...

“El lunes por la mañana puse mi misión en manos del Santo Padre. Al invocar la presunción de inocencia, no aceptó esta renuncia. Me ha dejado la libertad de tomar la decisión que me parece la mejor para la vida de la diócesis de Lyon hoy. Por sugerencia suya y porque la Iglesia de Lyon sufre desde hace tres años, he decidido retirarme por un tiempo y dejar la conducta de la diócesis al vicario general moderador, el padre Yves Baumgarten. Esta decisión surtirá efecto a partir de ese día. Lyon, 19 de marzo de 2019. Felipe Barbarin, arzobispo de Lyon.

Y añadió en una entrevista que permanece “en el título pero me retiro de la conducción de la diócesis” y precisó que no celebraría más todos los oficios de la catedral de Lyon.

Reacciones

La decisión del Papa de respaldar al cardenal como arzobispo de Lyon fue acertada, a mi parecer, pero obviamente no gustó a las organizaciones de víctimas que quieren ver a todo prelado fuera de la Iglesia o en la cárcel. Los asuntos de la pederastia han pegado duro la credibilidad de la institución y sus críticos le echan de todo la culpa a Jorge Mario Bergoglio.

La reacción del papa Francisco “deja claro que el problema de la pederastia es la Iglesia y es el papa, hoy la problemática no está ni en los curas, ni en los cardenales, ni en la Iglesia francesa, sino el papa mismo, que es el responsable de la situación”, dijo François Devaux, presidente de la asociación Palabra Liberada, que agrupa a víctimas de pederastia en Lyon y que fue la responsable de llevar al cardenal Barbarin a juicio.

“Esto me parecía improbable que (el papa) pudiera cometer semejante error. Es increíble”, reaccionó en declaraciones a la agencia AFP François Devaux.

“Yo creo que este hombre logrará matar a la Iglesia”, agregó, mientras que otro integrante de la asociación, Pierre-Emmanuel Germain-Thill, fustigaba una decisión “chocante” y “un nuevo paso en falso” por parte del papa.

“Con una decisión así, (Francisco) demuestra la incoherencia y la ausencia de fiabilidad en lo que pueda decir y hacer” en esta materia, agregó en conversación telefónica de Devaux con el País...

Y respecto de la apelación de la condena por parte de la defensa de Barbarin, Devaux se manifestó tranquilo. “No han entendido que eso no cambia nada, que es una cuestión moral y no sólo de justicia”, señaló.

Por su parte, la Conferencia Episcopal de Francia (CEF), en una declaración en la que tomó inusualmente distancia, se expresó “sorprendida” de una situación “inédita”.

El presidente de la CEF y Obispo de Marsella, Mons. Georges Pontier precisó que comprendía que la decisión del papa resulta del “conflicto entre dos exigencias”, aquella de “respetar el curso de la justicia” y aquel de “cuidar el bien de la diócesis de Lyon”.

El 7 de marzo la CEF indicó en un comunicado que sólo “tomaba nota de la decisión de la justicia sobre Barbarin por no denunciar” los abusos sexuales de Preynat; pero señaló que “no comentará la decisión”.

“Como todo ciudadano francés, el cardenal Barbarin tiene el derecho de utilizar los recursos que están a su disposición, que es lo que ha hecho y de lo cual esperamos el resultado del procedimiento”, indicó la CEF.

La defensa del cardenal Barbarin apelaron el falló de la jueza Brigitte Vernay y esperaran el fallo en segunda instancia; “nosotros esperamos que el proceso en apelaciones se realice lo más rápido posible, en julio o septiembre”, declaró a la agencia AFP André Soulier, quien celebró la decisión papal.

La decisión papal de utilizar el principio de presunción de inocencia se produce en momentos en que Francisco se esfuerza por restaurar la fe en la Iglesia Católica, tras una serie de escándalos de abusos sexuales registrados en varios países del mundo, y días después de la gran cumbre mundial que se llevó a cabo hace unos días…

¿De qué se trata este asunto?

El juicio

El 7 de enero de 2019, Barbarin negó ante el tribunal haber encubierto casos de pedofilia.

En aquella audiencia también comparecieron otros cinco eclesiásticos, acusados de “no denunciar la violencia sexual contra menores” y “por no dar asistencia a las personas en peligro” ante los abusos cometidos por el padre Bernard Preynat.

Pero los juzgadores sólo condenaron a Barbarin y decidieron absolver a los otros cinco acusados, todos antiguos altos responsables de la diócesis de Lyon.

Las acusaciones fueron planteadas por diez de las más de 70 víctimas del sacerdote, que en las décadas de 1970 y 1980 era capellán de un grupo scout en la periferia de Lyon, pero que no estaba vinculado al movimiento scout oficial.

“Nunca he buscado esconder y aún menos encubrir esos horribles hechos”, señaló el cardenal que dirige la Arquidiócesis de Lyon desde 2002. Además se disculpó por algunas de sus afirmaciones públicas de los últimos años. “No tengo nada más que declarar. No he sabido siempre utilizar las palabras más correctas. Lo que digo hoy viene de lo más profundo de mi corazón y mi fe”, señaló en la declaración leída al inicio de su comparecencia.

Según informó la web Vatican News, el purpurado habló sobre los abusos cometidos por el padre Preynat contra los menores scout. Una de las víctimas, Alexandre Hezez, se reunió con el Cardenal Barbarin en noviembre de 2014 para narrarle lo que padeció de niño.

Ante estos hechos, el arzobispo decidió transmitir el testimonio al Vaticano. Al mismo tiempo exhortó a Hezez a encontrar a las demás víctimas para iniciar un procedimiento judicial, ya que los abusos que había sufrido habían prescrito según las leyes francesas.

Y así fue.

El 31 de agosto de 2015 el cardenal Barbarin, de acuerdo con el Vaticano, retiró de sus funciones al sacerdote violador. “Hice exactamente lo que Roma me ha pedido”, dijo. Sin embargo, admitió haber sido “imprudente” cuando nombró al sacerdote Preynat en 2011 para que dirigiera un decanato cercano a Roanne.

El sacerdote Bernard Preynat confesó haber abusado de miembros de los boy scouts en las décadas de 1980 y 1990 y será juzgado por separado.

El caso inspiró al director francés Francois Ozon a filmar una película, “Grace a Dieu”, que se presentó recientemente en el Festival de Berlín; en el filme de 137 minutos participan Melvil Poupaud, Denis Menochet, Swann Arlaud y Josiane Balasko. Lo distribuye Golem Distribución.

Un filme que hay que ver…

¿Quién es Barbarin?

Es la más alta autoridad de la Iglesia Católica procesada en Francia en relación con casos de abusos a menores. Y es el tercer cardenal, en el lapso de pocas semanas, en verse involucrado en un escándalo que ha manchado como nunca la credibilidad de la Iglesia. Al margen de George Pell, que fue miembro del grupo de cardenales consultores del Papa y prefecto de Economía de la Santa Sede y desde hace días se encuentra encerrado en una cárcel de alta seguridad de Melbourne, el cardenal estadounidense Theodore McCarrick, influyente purpurado, fue expulsado del sacerdocio a mediados de febrero tras ser hallado culpable de haber abusado de seminaristas.

Philippe Barbarin fue papable en el cónclave de 2013 Christian Ignace Marie Barbarin es originario de Rabat, Marruecos; es cardenal francés, arzobispo de Lyon y primado de las Galias.

El 21 de octubre de 2003 fue nombrado cardenal-presbítero de Santissima Trinità al Monte Pincio por el papa Juan Pablo II. Participó en el cónclave de 2005, en que salió elegido papa Benedicto XVI. El 26 de noviembre de 2012 realizó una visita ad limina a Roma con otros obispos de Francia.

Barbarin se licenció en Filosofía en la Universidad de París-Sorbona (París IV).

En 1973 ingresó en el seminario de los Carmelitas. Tiene un doctorado en teología por el Instituto Católico de París.

Barbarin es miembro de la Comisión Doctrinal de la Conferencia Episcopal de Francia.  También es rector de la Universidad Católica de Lyon.

Es Caballero de la Legión de Honor desde el 31 de diciembre de 2002, Oficial de la Orden Nacional del Mérito desde el 8 de mayo de 2007 y Oficial de la Legión de Honor desde el 15 de abril de 2012.

Barbarin fue considerado papable en el cónclave de 2013, en el que finalmente salió elegido el cardenal Jorge Mario Bergoglio, que pasó a ser el Papa Francisco.

Duro golpe al Papa Francisco

@fredalvarez | @OpinionLSR | @lasillarota