La violencia deja un saldo de al menos 60 asesinatos este viernes Santo y parte del sábado de Gloria en todo el país.
En 15 de las 32 entidades se registró alguna muerte violenta, siendo la masacre en Minatitlán, Veracruz, la que más atrajo reflectores
La noche del viernes un grupo armado incursionó en una fiesta que se celebraba en dicho municipio veracruzano disparando contra los asistentes y dejando un saldo de 14 muertos, entre ellos un bebé de un año de edad.
Sin embargo, Veracruz no es el estado que más muertos ha dejado los dos últimos días, sino Chihuahua, donde al menos 15 personas han sido asesinadas, informaron medios locales.
En territorio chihuahuense destacó el hallazgo de una fosa clandestina los cuerpos de cinco personas asesinadas y envueltas en cobijas en las faldas del Cerro del Caballo, en Ciudad Juárez.
En Jalisco, cinco personas fueron asesinadas en los dos últimos días: un encobijado en Tlajomulco, dos hombres ejecutados en Tlaquepaque, un muerto a golpes en Zapopan y un asesinado a balazos en Encarnación de Díaz.
Donde también hubo cinco personas asesinadas fue Oaxaca: una mujer de 22 años fue apuñalada tras un asalto en San Juan Bautista Tuxtepec, otra fémina de 50 años fue asesinada a balazos en Tuxtepex, un joven de 20 años fue atacado con arma de fuego en San Lucas Ojitlán, en Putla Villa de Guerrero encontraron el cuerpo sin vida de un varón al interior de un taxi.
El quinto asesinado en tierras oaxaqueñas fue presuntamente un primo de Misael Martínez García, presidente municipal de Mazatlán Villa de Flores, quien habría sido abatido por el padre del alcalde Avelino Martínez.
En Guerrero, Puebla y San Luis Potosí fueron asesinadas tres personas en cada estado, destacando el caso de la entidad potosina, donde un grupo armado disparó contra el pintor Héctor Armando Domínguez Rodríguez, su padre y su hermano, acabando con la vida de los tres.
En Hidalgo, Michoacán, Sinaloa y en la Ciudad de México fueron asesinadas al menos dos personas en cada entidad.
Mientras que Yucatán, Tamaulipas, Estado de México y Nuevo León suman un homicidio cada uno.