En respuesta al atentado yihadista en el que murieron al menos doce militantes en Túnez, el país se declaró en estado de emergencia e impuso un toque de queda para sus ciudadanos.
El ataque perpetrado este martes fue llevado a cabo por un suicida que hizo estallar un autobús con agentes de la guardia presidencial que pasaba en la avenida Mohamed V frente a la sede del antiguo dictador, Zinedin el Abedin Ben Ali.
Es la segunda vez que el gobierno lleva a cabo esta medida, después de que mantuvo por dos meses y medio de emergencia decretados el 26 de junio del presente año tras el ataque que mató a 38 turistas extranjeros.
Durante ese tiempo las autoridades arrestaron alrededor de 2 mil personas y desmantelaron decenas de células yihadistas dispuestas a atacar, informaron.
aat