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Inmigrantes no denuncian violencia doméstica

El número de arrestos por parte de agentes del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) por violaciones a ley de migración aumentó 37%

Escrito en MUNDO el

Mujeres latinas que viven en Estados Unidos tienen que callar que sus esposos las golpean. Los hacen por temor a que las autoridades puedan deportarlas si realizan una denuncia. 

Algunas de ellas han soportado golpes y violencia por años, incluso en momentos en que han estado embarazadas.  

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La razón por la que no recurren a las autoridades es porque saben que su estancia en Estados Unidos es ilegal y podrían ser deportadas. Incluso hay ocasiones en que los abusadores amenazan a las víctimas con llamar a agentes de migración si es que intentan denunciarlos. 

De acuerdo con un reportaje realizado por Los Ángeles Times, el número de reportes de mujeres latinas que han sido víctimas de violencia dentro de sus hogares ha disminuido en los últimos siete meses, en comparación con el año pasado. 

Las autoridades estadounidenses,  atribuyen este fenómeno a las constantes amenazas del gobierno de Donald Trump, especialmente por el temor a que el mandatario amplíe las órdenes ejecutivas en las que los inmigrantes son el blanco. 

En Los Ángeles durante 2017, las personas latinas han reportado 3.5% menos los casos de abuso conyugal, en comparación con los primeros siete meses de 2016. 

Sin embargo ese mismo patrón se repite en las ciudades de San Francisco y San Diego, las cuales registraron una disminución más pronunciada con 18% y 13% menos denuncias, respectivamente. 

La disminución de delitos de violencia se refleja diferente entre la comunidad latina y los ciudadanos estadounidenses, ya que la cantidad de denuncias de las personas “no latinas” se mantuvo igual de un año a otro. 

Ese temor por denunciar puede explicarse cuando se ubica que el número de arrestos por parte de agentes del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) por violaciones a ley de migración aumentó 37% durante el primer semestre de 2017.

“Tienen miedo de nosotros. Y la razón por la que nos tienen miedo es porque piensan que vamos a deportarlos. No saben que no los deportamos; no pedimos su estatus migratorio ", asegura el comisionado del Condado de Los Ángeles, Mario González. 

Funcionarios del ICE apuntas que las personas que sean víctimas de violencia no son deportadas, por el contrario pueden extender visas para quienes sufran delitos violentos y aviso sexual. 

Con información de Los Ángeles Times