Este lunes el vaticano anunció que abrió la puerta a que varones casados de edad avanzada puedan ejercer el sacerdocio, el fin de ello es que personas indígenas y católicas que habitan en las zonas más remotas de la Amazonía, puedan cumplir con sus necesidades religiosas, debido a la escasez de sacerdotes en dicha región.
Lo anterior, es considerado una potencial eliminación del celibato como uno de los requisitos para que un hombre pueda ordenarse como sacerdote. Hecho ante el que los expertos eclesiásticos más tradicionalistas han externado su preocupación.
Acorde con un documento del Vaticano en la Amazonía dicha falta de sacerdotes dificulta que en dichas zonas se celebre de manera frecuente la eucaristía. “Por ello se pide que, en vez de dejar a las comunidades sin eucaristía, se cambien los criterios para seleccionar y preparar los ministros autorizados para celebrarla”.
El celibato es un don para la Iglesia”, detalla el documento. No obstante, señala que ha recibido distintas solicitudes para que en las zonas amazónicas más remotas “se estudie la posibilidad de la ordenación sacerdotal para personas ancianas, preferentemente indígenas, respetadas y aceptadas por su comunidad, aunque tengan ya una familia constituida y estable”.
Por su parte, el papa Francisco ha expresado anteriormente la posibilidad de considerar el ordenamiento viri probati -latín para hombres de carácter evidente-, sin embargo la cuestión del celibato permanecería intacta.
“La revolución para Francisco es darles importancia a las poblaciones locales y a sus culturas”, expone el reverendo Giuseppe Buffon, profesor de historia eclesiástica en la Universidad Pontificia Antonianum, en Roma. “Está pensando en lo local”, apuntó.
En octubre próximo, un sínodo de obispos discutirá este cambio, con el fin de que personas indígenas y religiosas en la región panamazónica de Bolivia, Brasil, Colombia, Ecuador, Guinea Francesa, Guyana, Perú, Suriname y Venezuela puedan contar con un sacerdote que esté casado.
Se pide superar la rigidez de una disciplina que excluye y aleja, por una sensibilidad pastoral que acompaña e integra”, expone el comunicado del Vaticano.
De acuerdo con el sínodo, el celibato es muestra de una falta de disciplina doctrinal, misma que se ha notado durante el pontificio de Francisco. Esta reforma, abriría la puerta a todo tipo de cambios que diluyan la ortodoxia de la iglesia, aseguran.
djh