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"Ya no sabíamos qué hacer", las justificaciones de Mario y Giovana en el asesinato de Fátima

Giovana y Mario “N” han realizado una serie de declaraciones con las cuales "justifican" y "obvian" el feminicidio de la niña de 7 años

Escrito en METRÓPOLI el

Tras su detención en en el municipio Isidro Fabela, Giovana y Mario “N” han realizado una serie de declaraciones con las cuales "justifican" el asesinato de la pequeña Fátima de 7 años.

Giovana, sospechosa de raptar a la pequeña Fátima, contó a autoridades mexiquenses y capitalinas que su novio y también sospechoso, Mario Alberto “N”, le pedía que vistiera y arreglara a la menor para que pareciera “su novia”.

La mujer justificó mientras lloraba que Mario Alberto la amenazaba con exigirle también hacerlo con sus propias hijas; mientras esto ocurría, el hombre se mantuvo tranquilo y reacio a contestar las preguntas de los oficiales.

Giovana, quien fue la persona que recogió a Fátima la tarde del 11 de febrero pasado afuera de su escuela en Tláhuac, la llevó a dos domicilios en Xochimilco.

Por su parte Mario Alberto hizo una mueca, como si quien lo estaba entrevistando en el Ministerio Público tenía que parecerle obvio y respondió: “pues porque ya no sabía qué hacer, ya la andaban buscando”.

Mario Alberto lucía más tranquilo que su novia, Giovana, quien en todo momento estuvo envuelta en llanto y señalando a su pareja como un golpeador que la tenía bajo amenaza constante. Sin embargo, la mujer fue la que, se presume, estranguló a la víctima con un cinturón, mientras el hombre la inmovilizó sujetándola por detrás.

La justificación del asesinato según la pareja fue porque se enteraron por las noticias que las autoridades buscaban a la menor, quien estuvo con ellos un par de días.

Según detallaron, Fátima le decía a Giovana “tía”, pues había vivido un tiempo con ella, su madre Magdalena y su padrastro en Tláhuac y por todo el abuso que recibió decidieron privarla de la vida.

Tras el feminicidio de Fátima, cuyo cuerpo fue abandonado cinco días después en un camino solitario de Tláhuac, Giovana y Mario Alberto huyeron al Estado de México, a la casa de la tía de Mario Alberto, en una localidad del municipio Isidro Fabela.

Allí, de acuerdo con los reportes oficiales, fueron ubicados por tres vecinos, aunque después autoridades capitalinas rectificaron y precisaron que fue solo uno, el cual dio aviso a la Policía Municipal.

Como aún no había órdenes de aprehensión e intentaron sobornar a los uniformados, Giovana y Mario Alberto quedaron a disposición del Ministerio Público de Atizapán por el delito de cohecho.

fmma