Main logo

Colectan toallas sanitarias para menores recluidas en Quinta del Bosque, Edomex

Al interior de los centros de internamiento, este artículo de higiene personal tiene un costo de hasta 10 pesos, mientras que en una tienda vale tres pesos

Por
Escrito en METRÓPOLI el

Cuando una mujer está en prisión, menstruar -como sucede cada mes- y vivir el proceso de manera higiénica y digna, es un privilegio. No todas cuentan con los aditamentos para evitar manchar su ropa, muchas viven en el abandono y la falta de agua también se convierte en una complicación para lavar las prendas.

Por lo anterior, estudiantes de las Facultades de Medicina y de Ciencias Políticas y Sociales de la Universidad Autónoma del Estado de México, así como integrantes de la organización El Taller de Meztli, llevan a cabo una colecta de toallas sanitarias para las menores que se encuentran en el Centro de Internamiento Quinta del Bosque, ubicado en Zinacantepec.

Dentro de los centros de internamiento o los penales, una toalla sanitaria les considerada artículo de lujo, por lo que para subsanar la falta las mismas, las personas menstruantes se ayudan de calcetas, papel higiénico, camisetas, retazos de tela e incluso cubrebocas.

Sin embargo, por no tener la higiene necesaria, son susceptibles a infecciones vaginales, es por ello que se busca que la campaña y el taller que se les ofrecerá a las menores infractoras genere consciencia no sólo en ellas, sino también a sus familiares que son quienes las proveen de las toallas sanitarias.

“La situación que viven las niñas, adolescentes, mujeres y personas menstruantes -porque también hay que tener presentes a los hombres trans- dentro de los centros penitenciarios, no es sencilla, la falta de acceso a esto productos les impide vivir una menstruación digna como cualquier persona debería de vivirla teniendo en cuenta que la menstruación no es un privilegio sino un proceso natural que no podemos controlar”, declaró Ariadna Calzada al darle luz verde a la colecta.

Destacó que, en promedio, una mujer gasta 120 mil pesos en aditamentos para reglar de manera “normal” entre los 15 y 50 años de vida, por lo que hacerlo se convierte en un lujo para quienes viven privadas de la libertad sin un ingreso fijo.

(Foto: Fernanda García)

“Tampones no se pueden ingresar, copas menstruales no son asequibles por la cuestión de higiene porque no se pueden esterilizar fácilmente, otros productos como calzones, esponjas, discos y todos los derivados pues también son más complicados por la cuestión del agua, entonces, las toallas son la única opción. 

“Hay que pensar en las que son abandonadas, que así se les conoce, necesitan trabajar ahí adentro para poder acceder a estos productos y las que reciben de las familias, los venden”.

La colecta está enfocada a toallas sanitarias ya que al interior de los centros de internamiento y penales tienen un costo de hasta 10 pesos por unidad mientras que en una tienda normal es de tres pesos.

“Aproximadamente nuestra meta es juntar más de mil toallas, también creo que es importante destacar que es importante que sean paquetitos, puede ser de día, de noche, de cualquier marca, no hay ningún problema mientras sea en paquetito y pues será a todas las personas que en ese momento se encuentren internas ahí”.

Para apoyar, sólo es necesario acudir a las Facultades de Medicina o de Ciencias Políticas y Sociales, además quetambién se puede gestionar la entrega a través de las redes sociales del Taller de Meztli hasta el próximo 20 de junio, ya que la entrega será el 28 de junio.

ET