Las niñas también son artistas crean dibujos, relatos, cuentos, pinturas y esculturas. A través de sus creaciones no sólo expresan sus emociones y dejan volar la imaginación, también reflexionan sobre lo que es para ellas ser niñas, sobre sus experiencias vividas, sobre la discriminación y los estereotipos de género.
En el marco del Día Internacional de la Niña, La Cadera de Eva e Isla de Vapor lanzaron una convocatoria para niñas artistas, donde las invitamos a contarnos desde su perspectiva qué es ser niña.
Isla de Vapor es una revista cultural hecha por y para niñas, que ha publicado las creaciones de alrededor de 100 niñas creadoras, principalmente latinoamericanas. Ale Moreno, editora e impulsora de Isla de Vapor, nos acompañó en un Facebook Live la semana pasada, en el que platicamos con el club de niñas editoras de la revista.
Es un peligro ser niña en un país como México
Cassandra, Sari Lu, Fátima, Sofía e Isabel nos contaron sobre lo que significa para ellas ser niñas creadoras, tener un espacio para publicar sus obras y al mismo tiempo, conocer a otras niñas con los mismos intereses.
La reflexión sobre los estereotipos de género
Althea Cassandra de 11 años es una de las niñas que forma parte del club de niñas editoras de Isla de Vapor y escribió un texto sobre lo que significaba para ella ser una niña, en sus palabras contó sus primeras experiencias con la discuminación en razón de género y nos llevó a la reflexión sobre los estereotipos de género.
“Aunque según el mundo sea igualitario las mujeres todavía somos discriminadas”, escribió Cassandra en su texto.
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Su texto fue clasificado por Isla de Vapor como una nota de diario, y en sus letras contó que a su corta edad ya ha vivido discriminación. A Cassandra le gusta tener el pelo corto y en el Kinder le gustaban las tortugas ninja por lo que tenía unos tenis de esa caricatura. Un día dos niñas le dijeron que parecía niño por su pelo y sus zapatos, dejando caer sobre ella el peso de los estereotipos de género.
“Fue mi primera experiencia de discriminación que sí me marcó mucho”, cuenta Cassandra, a quien después de ese día comenzaron a saludar en la escuela como si ella fuera un niño, todo por su ropa o su apariencia.
“Aunque me hubiera gustado que esas malas experiencias no pasarán, creo que han sido parte de mi y por eso ahora soy quien soy. He aprendido a abrazar mis momentos felices y mis momentos tristes también”, concluye Cassandra en su texto.
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Las creaciones artísticas de las niñas
Fátima, Sari Lu, Sofía, Isabel y otras niñas también nos contaron a través del arte lo que significa para ellas ser niña:
