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Inevitable coronavirus

En México, los directivos de la Liga MX decidieron correr el riesgo. Una semana más de actividad y pueden detener su torneo | Omar Pérez Díaz

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Escrito en HIDALGO el

El técnico argentino del futbol, César Luis Menotti, nos dio una frase eterna:

“El futbol es la cosa más importante de las cosas menos importantes”.

Esta reflexión nos ayuda a entender porque, a nivel mundial, el deporte está pagando las consecuencias de una pandemia como el Covid-19 o Coronavirus, enfermedad que detonó en China hace unos cuatro meses.

En México, los directivos de la Liga MX decidieron correr el riesgo. Una semana más de actividad y pueden detener su torneo, tal y como ya estaba previsto en su calendario del Torneo Clausura 2020.

Ante la inevitable llegada de este mal, tarde o temprano las actividades en México tendrán qué detenerse para contener su propagación entre la población.

En Europa ya frenaron la Champions League; en Estados Unidos todas sus ligas profesionales; en Sudamérica las eliminatorias mundialistas; en Australia el arranque de la Fórmula Uno…

No se trata de pánico, más bien, una cuestión de salud pública.

Las autoridades de nuestro país calculan que el brote del Covid-19 sucederá después de la tercera semana de marzo. “Justo a tiempo”, pensarán los dueños del balón, que desean jugar la fecha 11 con gente en los estadios antes de parar dos semanas, tal y como estaba previsto por la Fecha FIFA. Todo fríamente calculado.

Tampoco es algo nuevo para el futbol mexicano tomar estas decisiones.

En el Torneo Clausura 2009, toda la jornada 16 se disputó a puerta cerrada; lo mismo que algunos encuentros de las fechas 15 y 17. En esa ocasión, era una medida para controlar el impacto de la influenza H1N1, que generó temor a nivel mundial. Hoy, ese microbio permanece en la población y año con año provoca decenas de muertes.

El Coronavirus tendrá el mismo destino: llegó para quedarse. Tampoco se asuste: algo similar nos ha sucedido con el dengue o el chikungunya, que también cruzaron fronteras antes de instalarse en México, aunque a una velocidad menor.

No somos inmunes a esta pandemia; sin embargo, con los antecedentes antes mencionados, hemos desarrollado hábitos de higiene que nos ayudan a enfrentar su embestida, a diferencia de naciones como Italia o Irán, donde nunca esperaron una situación tan crítica.

Antes de entrar en pánico, aplique las medidas de prevención que aprendimos durante la última década. Mucho ayudará a evitar los efectos de esta infección.

¿Y el deporte? Bueno, dos o tres semanas de pausa no vendrán mal, siempre y cuando los directivos elijan el momento adecuado para tomarlas.

REMATE

Además de la influenza H1N1, el futbol mexicano igual se ha detenido por el paro arbitral en la fecha 10 del Torneo Clausura 2017. Ese mismo año, pero en el Torneo Apertura, también la fecha 10 se pospuso en solidaridad con las víctimas y daños que provocó el temblor del día 19 de septiembre.