La tasa de homicidios dolosos, continúan estableciendo marcas históricas, en el primer semestre de 2018 se presentaron 13 mil 738 carpetas de investigación por ese delito en el país.
Cifras del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP) indican que entre enero y junio el número homicidios se elevó 15 por ciento más al registrado durante el mismo periodo de 2017, cuando se denunciaron 11 mil 940 casos.
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El primer semestre de 2018 ya es considerado el más violento del sexenio con un promedio mensual de 2 mil 289 asesinatos. Según los datos difundidos por el organismo, 68 por ciento de estos delitos cometidos en la primera mitad de 2018 ha sido efectuado con algún tipo de arma de fuego.
De acuerdo con el SESNSP seis estados del país concentran la mitad de los homicidios dolosos cometidos en el semestre. Baja California, Guanajuato y Guerrero son las más violentas, con mil 294, mil 203 y mil 148 casos, respectivamente, seguidos de con mil delitos Jalisco, Chihuahua y Veracruz.
Únicamente siete estados no rebasaron los 100 casos en todo el semestre: Durango, Hidalgo, Querétaro, Tlaxcala, Aguascalientes, Campeche y Yucatán. Esta última apenas tiene 19 crímenes registrados.
Hace unos días, la encuesta Nacional de Seguridad Pública Urbana del Inegi reveló que el 81 por ciento de la población se siente insegura.
Para Carlos Mendoza, experto en temas de seguridad y justicia, consideró que los récords históricos de violencia evidencian el fracaso de la estrategia en la materia del Gobierno federal.
Apenas el 17 de julio, el Presidente Enrique Peña Nieto admitió que a pesar a los esfuerzos de todos los cuerpos de seguridad, los resultados del combate contra el crimen están lejos de ser satisfactorios.
No obstante, el mandatario confió que el Estado será capaz de restablecer el tejido social y contener a los grupos delictivos, los cuales, dijo, se han puesto por encima de la ley en algunas regiones.
Con información de Reforma y Milenio
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