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Wilbert dejó a su familia en Honduras para buscar el sueño americano

Tras 16 días de partir del departamento de Yoro, donde dejó a sus esposa y sus dos hijos, Wilbert se encuentra de paso en el municipio de Coatzacoalcos

Escrito en VERACRUZ el

COATZACOALCOS, VER.- Apenas cumplió dos meses de nacido su hijo y Wilbert Cabrera no tuvo de otra más que abandonarlo en su natal Honduras, para buscar el sueño americano.

El joven de 33 años forma parte de la lista de un total de dos mil 86 migrantes que la organización “Médicos Sin Frontera” (MSF) ha contabilizado en el sur de Veracruz y que intentan llegar a Estados Unidos.

“Dejé a mi esposa e hijos en Honduras, en el departamento de Yoro, porque la situación está cada vez más complicada y no hay trabajo o pagan muy poco y ahora que nació mi bebé, pues no había de otras más que salir a buscar un mejor futuro para ellos”, externó el hondureño.

Lleva 16 días viajando desde que salió del departamento de Yoro, donde dejó a su esposa y sus dos hijos: una niña de tres años y su bebé recién nacido.

Wilbert cuenta que en su último trabajo como obrero ganaba entre 100 y 130 pesos al día, lo cual tenía que dividir entre comida y gastos para sus hijos.

“Y ahora hay que comprar leche y pañal para la bebé y eso no alcanzaba”, expresó.

Veracruz encabeza la lista de flujo migratorio en el sur del país

“Médicos Sin Frontera” es una organización civil que opera en el país y diversas partes del mundo, tiene como objetivo dar una asistencia inmediata y temporal a las personas más necesitadas poniendo la acción sanitaria en primer lugar, principalmente dirigida a los migrantes que diariamente buscan el sueño americano desde diversas estaciones del tren.

De acuerdo con Sergio Luis Palacio, gestor de actividades medicas en MSF en el sur de Veracruz, en este inicio del 2021 Veracruz encabeza la lista de flujo migratorio en comparación con los estados de Chiapas y Tabasco, donde también tienen presencia.

“Nosotros tenemos presencia en Coatzacoalcos y Tierra Blanca que son los puntos donde hay flujo migratorio en Veracruz, y desde octubre del año pasado se reactivó el flujo migratorio; y hemos observado un pico en las últimas cuatro semanas y desde que inició el año, más en esta región, incluso más que en Tenosique Tabasco y Chiapas”, afirmó.

En los últimos años, Coatzacoalcos se convirtió en paso obligatorio de migrantes, pues desde este punto salen los trenes de carga que atraviesan el país.

“De estas dos mil 86 personas: el 90 por ciento son hombre de entre 18 y 50 años, es la tendencia que se ha mantenido; pero también hemos visto un aumento, ya que el 7 por ciento son mujeres y el resto son niños menores de 12 años”, detalló.

Lo preocupante para esta organización es que cada vez hay más presencia de mujeres y niños.

“Además de la falta de trabajo, súmale la violencia por eso no tenemos de otra y pues esperamos en Dios llegar a Estados Unidos, esa es la meta”, justificó Wilbert.

MSF pide que se abra albergue en Coatzacoalcos

“Desde que inició la pandemia del coronavirus el año pasado, gran parte de los albergues para migrantes de todo el país se vieron obligados a cerrar sus puertas, aun cuando estos lugares son los mejores para la asistencia de migrantes, sin embargo, desde el otoño del 2020 notamos que la gran mayoría comenzó a reaperturar con las nuevas disposiciones sanitarias, algo que no ocurre en Coatzacoalcos”, lamentó el representante de MSF.

Dijo que es necesario que el refugio de movilidad urbana de la Diócesis de Coatzacoalcos, que se ubica en los bajos del puente de la Avenida I abra sus puertas, ya que desde hace más de diez meses los hondureños y guatemaltecos, están expuestos no solo al virus SARS-COV2:

“Primero porque están expuestos a la intemperie y nos preocupa en puntos como el sur porque se exponen a situaciones de inseguridad, y a las redadas que realizan elementos policiacos, donde son detenidos. El cierre de este albergue además genera que los migrantes no puedan acceder al descanso después de un largo recorrido”, puntualizo.

El último refugio al que pueden acceder estas personas antes de llegar a Coatzacoalcos es el alojamiento en Salto de Agua, en el estado de Chiapas después de cinco días de recorrido de más de 300 kilómetros.

A la fecha solo se permite el acceso de mujeres y niños al albergue de Coatzacoalcos, aunque solo para realizar sus necesidades fisiológicas y bañarse, no para descansar. El servicio de alimentación continúa, pero solo se entrega la comida en la entrada y los migrantes tienen que buscar un lugar en el suelo debajo del puente pata degustar sus alimentos

“La verdad no sé qué pasa, pero esta mal, pero si hace falta que abran este albergue, porque luego nos queremos bañar o descansar un rato, pero pues no nos dejan pasar a los hombres, a veces solo para hacer del baño”, señaló Wilbert.

Migrantes que han sido rescatados, provocan motín en la estación del INM

Las ganas de llegar a la frontera norte han llevado a los migrantes de Centroamérica a buscar nuevas rutas para cruzar la República Mexicana.

Ahora lo hacen en camiones de carga, donde muchas veces son engañados por los famosos “polleros”, quienes cambio de varios cientos de pesos ofrecen cruzarlos por el sureste mexicano, sin importar las condiciones deplorables en las que son transportados.

En las carreteras del sur, autoridades estatales y federales han rescatado a más de 500 migrantes que viajaban hacinados en unidades de carga o camionetas en lo que va del 2021. En ellas son encontrados a punto de la deshidratación.

Todos han sido llevados a la Estación Migratoria de Acayucan a cargo del Instituto Nacional de Migración (INM) en esta región sur, en espera de ser repatriados.

Sin embargo, cada vez son mas los hombres, mujeres y niños rescatados por lo que la deportación es más demorada, lo que genera desesperación entre los migrantes, quienes el pasado 12 de febrero se amotinaron en el área de dormitorios de la Estación Migratoria.

Los migrantes de Honduras, Guatemala y El Salvador quemaron alguna colchonetas y objetos de madera, lo cual no pudo ser evitado por el personal de seguridad interna. De inmediato arribaron elementos de Protección Civil para controlar el fuego, seguido de patrullas de la Fuerza Civil y Guardia Nacional, quienes tomaron control de la situación.

Estos casos son más recurrentes, y personas como Wilbert no miden las consecuencias que pudiera generar su ruta, en medio de la pandemia del covid-19, donde, de acuerdo con lo informado por Sergio, no han encontrado ninguna persona con síntomas del covid-19, al menos en lo que va del 2021.

“Pero si no abren los albergues, la situación podría empeorar; por eso nosotros hemos ofrecido capacitar a los trabajadores del albergue para que operen con todas las medidas sanitarias, esperemos que ya lo acepten”, finalizó Sergio.

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