“No será ahorita” dijo el gobernador Cuitláhuac García ante los cuestionamientos sobre si agua de Veracruz será destinada a abastecer del vital líquido a Nuevo León ante la crisis de escasez que viven en su capital.
Ante medios de comunicación el mandatario estatal declaró que tendrá que ser la Comisión Nacional del Agua (Conagua) quien decida si se dan los permisos para que el agua del estado sea extraída hacia Monterrey, al norte del país.
“El presidente de la República ya expresó su opinión” respaldó García Jiménez la postura de López Obrador expresada en ‘mañanera’ a inicios de marzo, en la que se negó que el proyecto de llevar agua del Río Pánuco a Monterrey fuera factible.
El mandatario veracruzano insistió en que será Conagua quien tenga que tomar cartas en el asunto, y recalcó que Veracruz cuenta con el 30 por ciento hídrico nacional, por lo que tampoco descartó la opción de que agua pueda ser extraída al norte del país.
“Agua tenemos, nadamás hay que extraerla”, expresó y aseguró que si el proceso de extracción y traslado de agua corre a cuenta de quien la consuma no habría problema.
“Hacia el sur no tenemos problema, hacia el norte sí habría que tener alguna consideración (…) No tenemos problema en Tuxpan, no creo que tengamos problema en Pánuco” dijo.
El problema, explicó, no es que se lleve agua de Veracruz, sino que existía una concesión “malévola” a particular. Descartó que el proyecto “carísimo” y a muy largo plazo presentado inicialmente sea viable, respaldando al mismo tiempo la postura presidencial.
“Hay zonas vedadas (…) Para el consumo humano no tendría que estar vedado” reconoció Cuitláhuac García. “El agua es de todos”, finalizó.
Los cuestionamientos surgieron a raíz de que el gobernador Samuel García Sepúlveda aseguró que ya se cuenta con la autorización de Conagua para el proyecto Monterrey VI.
Dicha planeación, según documentaron medios locales en entrevista a Samuel García, pretendería extraer 15 mil litros de agua por segundo durante un año, lo que equivale a 473 millones 40 mil metros cúbicos por año durante los siguientes 50 años.