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Si eres jarocho de corazón harás algo de esto para despedir el 2019

Reuniones en plazas públicas, pirotecnia y rituales mágicos son parte del repertorio que los veracruzanos repiten cada año

Escrito en VERACRUZ el

Al acercarse el final del año, los jarochos se preparan para despedir el año viejo y darle la bienvenida al nuevo año que comienza.

Desde los rituales verdaderamente esotéricos, hasta lo simbólico de quemar o “destruir” los recuerdos de las malas experiencias en el año que finaliza, los veracruzanos tienen un repertorio amplio de actividades que pueden realizar para dejar los ciclos cerrados y comenzar con una mente fresca el siguiente periodo alrededor del Sol.

Si eres jarocho de corazón harás algo más que cenar y brindar con tus amigos o familiares, ya que seguramente atenderás algunas de las siguientes tradiciones que solo se hacen en esta ciudad.

LIMPIA CON HIERBAS EN EL MERCADO HIDALGO

Siguiendo la tradición mágica de Veracruz, algunos ciudadanos creyentes de estos rituales, acuden a puestos del mercado Miguel Hidalgo, en donde además de vender instrumentos e ingredientes para armar altares de diferentes creencias, realizan limpias tradicionales con hierbas.

Los brujos o brujas, azotan con manojos de hierbas a las personas, mientras que los cubren con humo de un puro de tabaco, y luego los rocían con aguardiente que guardan después de un largo trago en la boca, para después “pasarles el huevo” de gallina criolla, el cual, según la creencia, absorbe las malas vibras, para comenzar el nuevo año limpios de males espirituales.

QUEMAR AL AÑO VIEJO

En prácticamente todas las colinas del puerto, familias y a veces vecindarios cooperan para hacer “El Viejo”, un maniquí que simule a un anciano, hecho con ropas usadas, relleno de paja o papel, y en algunos casos cohetes de pólvora.

Esta figura representa al año que termina, y a la media noche, se prende en llamas para al mismo tiempo y de forma simbólica, quemar las tribulaciones y problemas que se tuvieron durante el año.

Debido a la limitación en el uso de la pirotécnia, en años recientes se cambiaron los maniquíes de paja por piñatas con la misma figura, aunque estas terminan siempre quemadas.

REUNIÓN EN LOS PORTALES

Una tradición más arraigada en personas de mediana edad en adelante, familias se reúnen en los portales del zócalo de Veracruz, para tomar alguna copa o comer en los restaurantes y bares del lugar, asimismo conviven entre todos.

En este espacio representativo del folclore jarocho se ven desfilar a políticos de diversos partidos, quienes desde sus mesas intercambian miradas y en ocasiones hasta saludos forzados.

Se acostumbra que el gobernador en turno acuda al sitio para tomarse una cerveza, lo mismo que los alcaldes, diputados y empresarios líderes de sectores.

También se acostumbra que, en la tarde del 31 de diciembre, algunas personas compran el billete para el Sorteo Magno de la Lotería Nacional, que se celebra ese mismo día.

En esta tradición, el exgobernador de Veracruz, Fidel Herrera Beltrán, supuestamente ganó dos veces el premio mayor, por lo que fue se le otorgó una suma millonaria.

EL PRIMER AMANECER EN EL BULE

El último ritual para darle la bienvenida al año nuevo, es reunirse a lo largo del bulevar Manuel Ávila Camacho, a donde llegan miles de personas de prácticamente todas las colonias y fraccionamientos de la ciudad.

La banqueta del bulevar se convierte en una fiesta masiva, en donde amigos, conocidos y hasta enemigos se reencuentran para compartir un abrazo de felicitación, brindar o continuar la fiesta que dejaron atrás en casa o en algún bar.

Sin embargo, los ánimos por la celebración están tan a flor de piel, que en ocasiones se han suscitado peleas que crecen hasta convertirse en verdaderas batallas campales, con decenas de personas golpeándose unas a las otras.

Al dar las 8:00 am una barredora humana formada por Policías Navales y elementos de Protección Civil camina sobre la banqueta para invitar a los fiesteros a regresar a sus casas, la decisión de terminar o seguir la fiesta depende de cada uno.