“Ni para comer teníamos”, dice Ricardo al recordar la crisis que desató la pandemia de la covid el año pasado. El cierre de playas los obligó a dejar su principal trabajo, desde hace cinco años es prestador de servicios turísticos y cuando la situación lo amerita es pescador.
Junto con su esposa e hijos administran el negocio La Esperanza, cuya principal actividad es dar recorridos a turistas y bañistas en “la banana acuática”, en la playa Punta Azul en el municipio de Boca del Río.
De aquel trabajo depende toda su familia, la cual durante un año tuvieron que resistir la nula actividad en el sector turístico.
“El año pasado no trabajamos nada, todo estuvo cerrado, pero gracias a Dios este año ya están abriendo, poco a poco se está estabilizando las cosas. Lo que pasa es que ahorita no hay mucho (trabajo), pero, aunque sea sale para comer, primero no había nada, tenía uno que andar ahí sufriendo”, contó.
A diferencia del municipio de Veracruz, que pese a la emergencia sanitaria las playas seguían siendo visitadas, las personas que vivían del sector turístico en Boca del Río tuvieron que permanecer más tiempo sin trabajar, hace apenas un mes volvieron a retomar actividades de manera habitual.
Fue el 1 de abril del 2020 que las autoridades boqueñas suspendieron todas las actividades no esenciales, hasta nuevo aviso, desde aquella fecha Ricardo y su familia levantaron su equipo de trabajo con la esperanza de volver pronto a la playa.
Actualmente solo tienen permitido trabajar en temporadas altas, puentes y días festivos, admite que todavía sigue siendo poca la entrada económica que hay en el sector, pero que es mejor eso a nada.
Pandemia lo dejó endeudado y tuvo que vender su carro
Durante el tiempo que no estuvieron trabajando se dedicó a la pesca, como muchos de sus conocidos que laboran en este sector, pero aquel oficio solo le servía para comer, ya que era poco producto que extraían del mar, aunado a eso el tiempo de nortes fue otro de los obstáculos a los que tuvieron que resistir.
“Te ganabas tus 100 o 150 pesos y aparte para consumo, pero a veces no había nada, a veces había si a veces no, así es la pesca”, dijo resignado.
Aseguró que no tuvieron ningún tipo de ayuda, solo una despensa que apenas y le alcanzó para menos de una semana, mientras que algunos pescadores pertenecientes a cooperativas sí obtuvieron apoyos, ellos como trabajadores independientes no recibieron nada.
Aunque el Gobierno Federal otorgó préstamos para las pequeñas empresas, Ricardo dice que prefirió no adquirir una deuda que le sería difícil de pagar.
Durante el tiempo que duró la pandemia tuvo que vender su carro con el que trasladaba su equipo, ya que el motor de la lancha con la cual remolca la “banana” se le había estropeado y la reparación le costó 25 mil pesos.
“En el carro subíamos la banana, subíamos cualquier cosa que se descompusiera, ahorita ya no tenemos. Tenemos que juntar para ver si compramos otro. Pagamos una camioneta 200 pesos por viaje, porque ya no tenemos con que transportarnos”, dijo.
También tienen que pagar la renta de la casa donde viven, la cual asciende a los 3 mil pesos al mes, durante la pandemia se atrasaron con seis meses de alquiler, la temporada de vacaciones de Semana Santa y los días festivos fueron los que los ayudaron a cubrir parte de los gastos.
Cae llegada de turismo internacional por pandemia
Para enero del 2021 el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) dio a conocer que el ingreso de turistas internacionales a México cayó 49.3 por ciento.
La Encuesta de Viajeros Internacionales (EVI), arrojó que en ese mismo mes ingresaron al país 3 millones 800 mil 940 visitantes, de los cuales un millón 923 mil 672 fueron turistas internacionales.
Mientras que el ingreso de divisas referente al gasto total de los visitantes internacionales reportó un monto de 934.1 millones de dólares, lo que significó una variación anual de (-)59.1 por ciento.
En tanto que el ingreso de divisas por concepto de turistas internacionales alcanzó 842.9 millones de dólares, de los cuales el 91.2 por ciento se derivó de los turistas de internación y el 8.8 de los turistas fronterizos.
Con relación a los primeros, destaca el monto de las divisas reportadas por los turistas que ingresaron por vía aérea con 716.7 millones de dólares.
Pese a que Ricardo aseguró que paulatinamente se están recuperando, todavía no han logrado recuperarse por completo, pues comenta que ahora los turistas llegan limitados económicamente.
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