Un grupo de habitantes de la localidad de Atoyac se manifestaron frente a las oficinas de la Procuraduría Estatal del Medio Ambiente, exigiendo que se cancele la clausura de la alcoholera Zapopan, la cual fue sellada en octubre de este año.
En la manifestación, pobladores y trabajadores de la planta exigieron que la Procuraduría del Medio Ambiente retire los sellos y permita que la empresa vuelva a funcionar, ya que muchos de los habitantes de la zona laboran en la planta y se ven afectados en su economía.
“Queremos que la reabran, tenemos mucha caña, tenemos hambre, queremos trabajar, que nos abran las puertas para que sigamos trabajando”, declaró el poblador Carlos Martínez.
Las personas provenientes de los municipios de Atoyac, Yanga y Cuitláhuac se apostaron frente a las oficinas de la PMA, ubicada en Boca del Río, portando pancartas con leyendas a favor de reabrir la planta.
Los inconformes reclaman que se acercan los meses de la zafra, y las toneladas de caña que se utilizan para generar alcohol se pueden quedar sin utilizar, además que la producción del destilado genera empleo también en los campos y el sector transportista.
Durante el mes de octubre, personal de la PMA acudió a la planta para colocar los sellos de clausura, debido a una serie de llamados de la Procuraduría para que se mejoraran los procesos de generación de contaminantes, los cuales fueron desatendidos.
Esta medida corresponde a las reiteradas denuncias de la población por la contaminación que genera esa empresa y otras asentadas en la zona al río Atoyac y el canal de riego Alfredo V Bonfil, lo que ha causado la mortandad de peces, langostinos y demás especies en el afluente y afectaciones a la salud de la población.