La Central Nucleoeléctrica de Laguna Verde, ubicada en el estado de Veracruz, presentó una situación de riesgo naranja –parámetro previo a la alerta máxima de seguridad-, durante el mes de septiembre de este 2020.
De acuerdo con una publicación del diario El País, el incidente se registró al filo de las 17:00 horas del 3 de septiembre, cuando se realizaron las maniobras para el “recambio de uranio enriquecido” que alimenta la central nuclear localizada en el municipio de Actopan.
El País detalla que se identificaron deficiencias por el “desempeño humano”, “una sana cultura de seguridad nuclear” y “aspectos programáticos u organizacionales”, según lo detallado en un reporte elaborado por la Comisión Federal de Electricidad (CFE), que es citado por el medio.
Sin embargo, según la publicación en octubre y principios de este mismo mes se presentaron dos incidentes más que activaron el riesgo en color naranja.
La Central Nucleoeléctrica de Laguna Verde cuenta con un sistema de monitoreo por colores que detallan el grado de peligro por el derretimiento del núcleo o componentes desconectados, que se utiliza con base a los estándares utilizados por la Comisión Regulatoria Nuclear de los Estados Unidos.
El color naranja es identificado como el paso previo a la alerta máxima, que utiliza el distintivo rojo.
Cómo se activó la alerta naranja
El recambio de uranio enriquecido, maniobra que hizo que se encendiera la alerta naranja, es la recarga de combustible que se realiza cada 18 meses, de acuerdo con las especificaciones que detalla El País.
El procedimiento se realiza en promedio durante un mes, consiste en cambiar las barras de uranio que alimentan la estación y el traslado de las que perdieron energía a la alberca de combustible gastado, ubicada dentro de la misma planta.
El 3 de septiembre, mientras se realizaban las maniobras, un contratista decidió continuar con los trabajos de cambio de mecanismos impulsores de las barras de control, fuera de programación y mientras el sistema estaba deshabilitado.
La intervención del contratista puso en riesgo a la planta durante 13 horas, para pasar después a color amarillo, que representa una disminución moderada de riesgo de seguridad, indica la publicación.
El 9 de noviembre la CFE emitió un comunicado para desmentir información difundida en un periódico local que consignó la denuncia de un extrabajador, acusando que la central nucleoeléctrica presentó una falla que puso en riesgo la operación.
En el escrito, la empresa del Estado detalla que no se había presentado ninguna falla o ponga en riesgo al personal o a la población civil.
Sin embargo, se pasó por alto el hecho exhibido por el diario El País, que mantuvo la alerta naranja activa debido a deficiencias, según el reporte.