Luis V., de profesión docente, nunca imaginó la serie de problemas que vendrían cuando firmó un contrato para acordar un préstamo de 143 mil pesos con una financiera del puerto de Veracruz.
El joven de 31 años solo necesitaba el 20 por ciento de dicha cantidad para pagar un adeudo de su automóvil, pero el promotor lo convenció de solicitar un monto mayor.
"Yo no necesitaba una cantidad muy grande, solo alrededor de 20 mil pesos, entonces pues me ofrecieron el crédito, pero yo les comenté que no estaba muy interesado, pero yo estaba indeciso", dijo.
Cubrir la totalidad del carro y solo pagar mensualmente el crédito fue el “gancho” con el que el Antonio Fernando Ruiz Pimentel, el presunto promotor, lo convenció.
El promotor llegó hasta la comunidad de La Tinaja, en Cotaxtla, a la escuela donde Luis trabaja como maestro.
Inicialmente, Antonio Ruiz Pimentel se presentó como empleado de la empresa Pre15na SA de CV, una Sociedad Financiera de Objeto Múltiple (Sofom) dedicada a brindar préstamos.
El promotor le pidió los datos de su identificación oficial y domicilio, los envió a su oficina y, en ese momento, le confirmó que alcanzaba un crédito de hasta 120 mil pesos.
La oferta del préstamo no convenció a Luis de inmediato, sino hasta unos días después, cuando acordó una cita con el promotor en una plaza de la zona norte de Veracruz.
El presunto estafador llegó a la cita con un contrato para que Luis lo firmara, sin embargo, el joven se negó, pues el documento estaba en blanco.
“Ahí yo tenía que haberme ido, no tenía yo que haber hecho ya nada, por las señales que me estaba arrojando, pero fui muy tonto y también tenía la presión porque requería el dinero”, contó.
Finalmente firmó el contrato y a los tres días, su cuenta bancaria recibió un depósito de 90 mil pesos, una cantidad menor a la que solicitó y que lo puso en alerta.
Antonio Ruiz Pimentel le explicó que la financiera tuvo problemas para depositar el resto del dinero, pero que se había hecho un ajuste para que el descuento en su nómina fuera menor.
La vez posterior al depósito del dinero fue la última cuando tuvo comunicación con el promotor de la financiera.
El primer descuento llegó a la tercera quincena con sorpresas para el joven docente, ya que en el primer pago le habían cobrado casi la mitad de su sueldo.
“Fue mi sorpresa que cuando llegó el primer descuento, a la tercera quincena, pues me habían quitado la mitad de mi sueldo, me estaban descontando aproximadamente como dos mil 500 pesos”, relató.
“NOSOTROS NO LO CONOCEMOS”; LUIS PROCEDIÓ ANTE CONDUSEF
Cuando Luis vio el monto que se le descontó, contactó inmediatamente a la financiera Pre15na SA de CV, sin embargo, la empresa lo desconoció.
“A usted, señor, nosotros no lo conocemos”, le respondieron.
Aunque el joven presentó a la financiera el contrato que había firmado con su presunto promotor, los trabajadores le aseguraron que su nombre no aparecía en la cartera de clientes.
Después de encontrarse con una situación que calificó como extraña, siguió investigando hasta que encontró en sus recibos de nómina algo que le llamó la atención.
Según sus recibos de nómina, Luis tenía descuentos de dos mil 246 pesos por un pago que se destinaba a una empresa nombrada Consupago.
Así, Luis descubrió que el presunto promotor de Pre15na en realidad era trabajador de Consupago, la empresa que le hizo el préstamo de 90 mil pesos.
Según el sitio web de la SOFOM Consupago SA de CV, la empresa es propiedad de la cadena de autoservicio, Grupo Chedraui.
El Informe Anual de Consubanco 2018 reveló que la familia Chedraui es propietaria del ente financiero a través del Grupo Consupago.
Los trabajadores de la empresa le confirmaron a Luis que efectivamente Consupago era la financiera con la que adquirió el crédito, sin embargo, se negaron a darle su contrato.
Se trataba de un contrato en el que Antonio Ruiz Pimentel falsificó firmas y en el que, además, puso referencias que el docente desconoce.
Lo supo porque se quejó ante Condusef, que obligó a Consupago a exhibir el contrato original del préstamo y a entregarle una copia.
El contrato falsificado era por un préstamo de 90 mil pesos con pagos quincenales de dos mil 500 pesos por cinco años, por lo que la deuda en total sumaba cerca de 240 mil pesos.
Otra situación extraña para Luis fue que Consupago le descontaba el crédito, pero el contrato estaba a nombre de Reyan SA de CV.
En su sitio de Internet, Reyan especifica que es un ente financiera que brinda créditos a docentes afiliados al Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE) Sección 32.
La Condusef ya no hizo más y solo invitó a Luis a iniciar un proceso legal contra la empresa ante la Fiscalía General del Estado (FGE)f.
“ME GASTÉ EL DINERO, PARA VIVIR”
Ante el exhorto de la Consusef, el joven visitó a varios abogados para solicitarles asesoría legal, pero cada uno le decía algo distinto.
Pronto encontró a un abogado, el único que le dio un poco de confianza, que le comentó que para iniciar un juicio debía devolver el dinero, pero ya lo había gastado.
“Para esto yo ya había agarrado gran parte del dinero, porque a mí me descontaban mucho.
Como me descontaban mucho y ya tenía yo las dos deudas, tanto el auto como el crédito, pues yo empecé a usar ese dinero para vivir”, narró.
Los descuentos siguieron durante varios meses hasta que el SNTE Sección 32, de Xalapa, tomó cartas en el asunto.
En aquel momento las noticias sobre los fraudes de financieras a maestros estaban por estallar, por lo que el SNTE destinó un grupo de abogados para apoyar a las víctimas.
Tras la primera reunión, los abogados se comprometieron a emprender el proceso legal contra diversas financieras.
En aquel entonces, Luis también se enteró que había diversos entes financieros que trabajaban con diversos modus operandi para estafar a docentes.
Los abogados nunca contactaron a los maestros, pero un día Luis recibió un correo de un litigante que se identificó como Arturo Carvallo, quien tomó el caso.
El joven ayudó al abogado a reunirse con otros profesores, por lo que entablaron una relación de confianza.
De acuerdo con lo que Arturo Carvallo platicó al docente, los abogados que anteriormente se hacían cargo de los casos fueron amenazados por una presunta “mafia” dedicada a defraudar, en la que incluso, aseguró, había políticos involucrados.
“¿Quiénes son esas personas que están permitiendo que jodan a los maestros con sus préstamos, sus financieras y sus malas jugadas?”, se cuestionó Luis.
SE DESHIZO DEL DESCUENTO, PERO NO DEL CRÉDITO
Con la ayuda del abogado, Luis pudo deshacerse del descuento no consentido que Consupago (o Reyan) le hizo por más de un año.
Al igual que él, varios maestros presentaron un expediente ante la FGE para abrir una investigación contra diversas financieras.
“El siguiente paso era irte a nómina federal en Xalapa y presentar que tú tenías un proceso de la fiscalía por cuestiones de un crédito que ellos estaban descontando.
Cuando yo investigaba cómo quitarme el descuento de encima, en la SEV me decían que solamente presentando un comprobante de que tú habías promovido un movimiento legal ante el ministerio público se podía quitar ese descuento”, contó.
Para prevenir que la financiera pudiera seguir descontando el préstamo, el joven cambió sus datos bancarios ante la Secretaría de Educación de Veracruz (SEV).
Eso no evitó que durante un año pagara más de 70 mil pesos. A la fecha, aún le llega correspondencia a su domicilio en el que la empresa exige el pago total de la deuda.
Sin embargo, nadie le da la cara presencialmente ni por vía telefónica.
SEV BLOQUEÓ A FINANCIERAS
En octubre de 2020, el secretario de Educación de Veracruz, Zenyazen Escobar García, informó que la dependencia bloqueó a 20 financieras por cobros excesivos a maestros.
El bloqueo se realizó luego de que integrantes del Movimiento Fuerza Magisterial presentaron quejas ante la SEV.
Zenyazen Escobar explicó que los cobros de las financieras eran excesivos, al punto de que había docentes que solo cobraban 20 pesos de su salario.
EL PUERTO DE VERACRUZ, MUNICIPIO CON MÁS QUEJAS EN CONDUSEF
De acuerdo con un comunicado de la Condusef, el municipio de Veracruz es el que registra más reclamos ante el organismo.
La Condusef atendió quejas de ciudadanos de 151 municipios durante el primer semestre de 2021, de los cuales Veracruz concentró 24.58 por ciento de las reclamaciones.
Según la información asentada en el documento, 979 veracruzanos se quejaron ante la Condusef por problemas con servicios financieros.
En la lista continúan con más quejas los municipios de Xalapa, Coatzacoalcos y Boca del Río.
Del total de las reclamaciones atendidas por la Condusef en el estado, el 55 por ciento fueron para el sector bancario, mientras que un 19 fueron contra SOFOM (financieras).
Además, se atendieron mil 176 quejas por posibles fraudes en 2021.
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