Su lento caminar y el cansancio, no fue impedimento para que Leticia Reyes acudiera al módulo de vacunación Granjas del Río Medio a ponerse la vacuna contra el covid.
Acompañada por su hija, la mujer de 90 años puede decir que es una sobreviviente del coronavirus.
Martha agradece que su madre siga con vida, después de haber estado a punto de morir derivado de las complicaciones que tuvo por infectarse del virus SARS-CoV2.
Ahora ella y su hermano decidieron traerla hasta la calle Texcatepec esquina Totutla, en la colonia Granjas de Río Medio, para que recibiera la primera dosis de la vacuna anticovid, pues aseguran que su cuerpo ya no resistiría un segundo contagio.
Desde las 6 de la mañana llegaron a formarse, pero no contaron con que más personas estuvieran guardando lugar una noche antes, por lo que mientras ella esperaba su turno sentada bajo la sombra de un árbol en una silla que les prestaron, su hijo se mantuvo en la fila.
“Estamos esperando, si Dios quiere que nos favorezcan con la vacuna, porque ella no va a aguantar una segunda vuelta”, comenta Martha.
La primera en contraer el virus fue Martha, ella cree que contrajo el covid trabajando, después de que padeció todos los síntomas la segunda en caer en cama fue Leticia, debido a su edad y a que sufre de hipertensión tuvo más complicaciones que su hija.
Mientras su madre escucha, Martha dice que el proceso que tuvieron que pasar para salvarla fue muy difícil, las noches en velas, las consultas con los doctores y verla que no podía respirar agobiaba a la familia.
“Todavía tiene secuelas y todavía el mes de febrero ella le daban crisis y se ahogaba, ella decía que se iba a morir, fue muy pesado”, contó.
La neumonía fue el síntoma principal por el cual requirió oxígeno, aunque Martha no lleva la cuenta afirmó que los gastos de consultas y medicamentos rebasaron los 10 mil pesos.
“El doctor nos dijo que si se salvaba era un milagro, pero el milagro se logró primero que nada con el favor de Dios que nos bendijo y nos cuidó y en segunda por el amor de mi hija que fue la mejor enfermera que pudimos tener las dos”, dijo Martha con la voz entrecortada.
Ambas mujeres pasaron el tratamiento en casa, cuidadas por sus hijas, ahora esperan pacientes juntas el turno de Leticia. Martha asegura que no importa que estén todo el día con tal de que su mamá pueda adquirir la dosis.
Este 9 de marzo en el puerto de Veracruz dio inicio la segunda etapa del Plan Nacional de Vacunación, donde se habilitaron 16 módulos en distintas zonas de la ciudad.
Este lunes 15 de marzo recibirán la dosis quienes por incapacidad no puedan salir de casa.
La vacunación comenzó en orden alfabético, es decir, de acuerdo con la primera letra del apellido paterno el martes 09 de marzo, inició con las letras de la A a la E; posteriormente el miércoles 10 de la F a la J; jueves 11, de la K a la O; viernes 12, de la P a la T y sábado 13, de la U a la Z.
De acuerdo con la Secretaría de Salud del Estado, los próximos días 14, 15 y 16 recibirán la dosis quienes por incapacidad no puedan salir de casa, un familiar tendrá que registrarlos en el módulo correspondiente y una brigada médica irá al domicilio; en tanto, los días 17 y 18, aquellos que no hayan podido asistir cuando era su turno.
Solo en la primera jornada de vacunación se aplicaron 11 mil 675 dosis de la vacuna Pfizer en los 16 centros de salud.
En donde más dosis se aplicaron fue en el auditorio Benito Juárez con 2 mil 180 vacunas; le siguió el Centro de Salud Las Bajadas con 2 mil 180 vacunas, Facultad de Medicina UV, 1 mil 290; Centro de Salud Los Pinos mil dosis; Instituto Tecnológico de Veracruz 900; Delfino Victoria/Santa Fe 175 y El Coyol 1 mil 60, Club de Leones con 1 mil 170.
Así transcurrieron primeros días de vacunación en el puerto
Un día antes que iniciara la jornada de vacunación en el municipio porteño personas ya se encontraban haciendo fila afuera de los distintos módulos, muchos de ellos eran familiares de los adultos mayores quienes se quedaron incluso a dormir en estos puntos.
Tal fue el caso de las instalaciones del Club de Leones y Granjas del Río Medio, al siguiente día no importó la lluvia y el mal tiempo, adultos mayores con paraguas y tapados con bolsas de plástico no se movieron de sus lugares con tal de recibir la vacuna.
Los días posteriores fueron de mucha controversia, ya que varias personas habían denunciado que no alcanzaron a recibir la vacuna, a pesar de haber asistido un día antes.
Esto se debió, según declaraciones de la subdirectora de Atención Hospitalaria de la Secretaría de Salud de Veracruz (SESVER), Romana Gutiérrez Polo, a que la logística no permite sacar todas las dosis al mismo tiempo.
Otros hechos polémicos fueron protagonizados por funcionarios y candidatos, quienes con declaraciones o acciones robaron la atención en torno a la aplicación de la vacuna covid.
Fue el caso del candidato a la diputación local en el distrito XIV por el partido político local Juntos Podemos, Antonio del Río Argudin, quien en plena jornada de vacunación realizó actos de proselitismo.
En un vídeo que se difundió en redes sociales fue captado en el DIF Matamoros regalando pan y café portando uniforme con el logotipo del partido, por lo cual fue exhibido en redes sociales tras tener una discusión con uno de los empleados de la Secretaría del Bienestar quien le pidió se retirará del lugar.
Otro caso fue la disputa mediática entre el gobernador de Cuitláhuac García Jiménez y el alcalde de Veracruz, Fernando Yunes Márquez.
El gobernador Cuitláhuac García Jiménez acusó al alcalde de Veracruz de usar "influencias" para que su suegra recibiera la vacuna.
Esto de nueva cuenta causó controversias en los dos mandatarios. El alcalde del municipio porteño retó al Gobernador a presentar pruebas para comprobar dichas acusaciones.
Buenas acciones también fueron parte de la jornada de vacunación
Pero no todo lo que aconteció en la primera semana de vacunación fue negativo, también existieron distintas personas que demostraron que pese a todo obstáculo y carencias siempre es posible contribuir con una buena acción.
Este fue el caso de Geraldine y Monserrat ambas tuvieron la iniciativa de ayudar a las personas que realizaban fila para la vacuna.
Monserrat, quien vive en las inmediaciones del centro médico El Coyol, brindó a los adultos mayores comida y su baño para quienes necesitarán del apoyo, al igual que dio bolsas de plástico que sirvieron de impermeable para que se protegiera de la lluvia.
Por su parte, Geraldine brindó su baño gratuitamente para las personas que desde un día antes hacían fila en el centro médico Granjas del Río Medio en la zona norte.
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