Juan Hernández tuvo que empeñar la máquina de coser de su esposa y el televisor de la casa para mantener a su familia, desde que inició la pandemia de covid-19 los ingresos en el taxi que conduce en la zona conurbada Veracruz-Boca del Río le alcanzan para cubrir la comida del día, pero no para pagar cuentas por servicios básicos y otras necesidades.
Desde el 29 de diciembre del 2020 y los días hábiles posteriores, se ha formado afuera de la sucursal ubicada en la avenida Independencia del Banco del Bienestar en Veracruz, para cobrar el dinero del programa “Tandas del Bienestar” que le fue autorizado el 28 de octubre.
Son 25 mil pesos que el Gobierno Federal le otorgará en una línea de crédito a la palabra, que utilizará para desempeñar las prendas y pagar las deudas de préstamos que pidió con amigos y familiares. El plazo para refrendar o pagar el préstamo por la máquina de coser de su esposa vence el próximo 6 de diciembre, por eso se muestra ansioso por pasar a realizar el cobro del dinero.
Sin embargo, desde hace una semana no consigue turno para pasar a cobrar el dinero, asegura que solo le dan largas, la tarjeta que le fue entregada con la instrucción de utilizarla para realizar retiros en cajeros automáticos, no puede usarla debido a que no tiene fondos.
Este 4 de diciembre se formó a las 5:00 am para tratar de ingresar a la ventanilla y solicitar el dinero, pero una falla en la logística del Banco del Bienestar provocó que él y otras personas se quedaran con las ganas de recibir el dinero.
Solo hubo oportunidad para que 40, de unas 200 personas, ingresaran al banco a cobrar la orden de pago.
“El miércoles nos dijeron que ya había saldo en la tarjeta, venimos ese día a hacer cola y nos dijeron el viernes que ya podíamos disponer del dinero, el sábado vine, nos formaron y no abrieron el banco, ahora nos dicen que solo van a atender a 15 personas, luego a 40, a mí me dijeron que estaba activa la tarjeta desde el 29 y que ya está disponible, me dijeron que ya podía sacar de 5 mil en 5 mil en cajeros si no quería pasar a ventanilla, pero la tarjeta dice que no está activa.”
El delegado del Bienestar en Veracruz, Manuel Huerta Ladrón de Guevara confirmó que hubo un problema financiero en el Banco del Bienestar en la ciudad de Veracruz, que complicó y generó atrasos para cubrir las órdenes de pago del programa Tandas del Bienestar.
Sin embargo, afirmó que este mismo lunes se regularización los problemas para cubrir los pagos a personas como Juan. Huerta Ladrón de Guevara señaló que desde el inicio se planteó que el pago se haría por órdenes escritas y no por tarjetas.
Mantiene a su esposa, hija y padres
Antes de la pandemia Juan lograba una cuenta de entre 700 y mil 500 pesos diarios, un tercio lo entregaba al propietario del taxi, otra parte se iba para pagar de 20 a 30 litros de gasolina y el resto lo utilizaba para los gastos de su casa y para mantener a su madre y su padre.
Afirmó que desde que inició la pandemia de covid-19 no dejó de trabajar por la necesidad de generar ingresos, sin embargo, la parálisis de actividades esenciales y la crisis que generó en otros sectores, redujo la demanda del servicio de taxi.
Los días más críticos hubo jornada en los que no levantó ni un solo pasaje, mientras que, en diciembre, mes que regularmente es bueno, la situación mejoró un poco, pero no lo suficiente para recuperar las ganancias que se percibían antes de la pandemia.
Para sobrellevar la reducción de ingresos, el taxista optó por pedir prestado a familiares y amigos, así como a casas de empeño para dejar cosas de valor como su televisor y una máquina de coser que utiliza su esposa.
“No había nada de trabajo, empeñamos, pedimos prestado, el dinero no es para gastarlo en lujos, es para pagar lo que empeñamos y lo que pedimos prestado (...), en este tiempo de pandemia no había nada, salías y en todo el día salía para gasolina y medio comer, pero seguían corriendo otras cuentas”.
Juan espera regresar este martes 5 de diciembre, para recibir el dinero que desde octubre le fue notificado que recibiría, con lo que espera salir de las deudas que acumuló en 10 meses que la pandemia causó afectaciones en Veracruz.
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