Main logo

José Nabor: intocable aún tras el Duartismo

A diferencia de los demás mandos policíacos, José Nabor consiguió evitar pisar la cárcel, y con el amparo continuará de cerca el proceso pero en libertad

Escrito en VERACRUZ el

Un recurso de amparo conseguido a su favor permite al último Secretario de Seguridad Pública (SSP) durante el sexenio de Javier Duarte de Ochoa, José Nabor 'N', eludir una orden de aprehensión girada por un juez de control tras ser relacionado con el delito de desaparición forzada.

El exjefe policíaco optó por darse a la fuga, tras darse a conocer la orden de detención emitida por un juez local como parte del Proceso Penal 22/2018, sin embargo, un Tribunal Colegiado de Circuito resolvió un Amparo en Revisión y le concedió la protección de la justicia federal.

Al exsecretario se le relacionó con desapariciones forzadas, aunque sus abogados argumentaron que a José Nabor se le violentaron sus derechos humanos, hipótesis en la que coincidió el magistrado Salvador Castillo.

La titular del juzgado Primero de Distrito, Karina Juárez Benavides, había concedido la suspensión definitiva pedida por el extitular de la Secretaría, con el supuesto de una violación a sus garantías al vincularlo al proceso 22/2018.

Otros ex altos mandos de la SSP, como el exsecretario de Seguridad Pública Arturo “N”; así como el exencargado de la Fuerza Civil, Roberto “N”, fueron detenidos, vinculados a proceso por el mismo delito y encarcelados.

Sin embargo, al darse a la fuga José Nabor ni siquiera tuvo que pisar la prisión para librar los señalamientos que realizó en su contra la Fiscalía General del Estado, cuando Jorge Winckler Ortiz estaba al mando.

FUERZA LETAL

A José Nabor 'N' se le investiga su supuesta participación en los delitos de desaparición forzada de acuerdo a lo relatado en la Carpeta de Investigación FEADPD/ZCX/011/2017; integrada por el exfiscal especial para la atención de denuncias por personas desaparecidas en la zona centro - Xalapa, David García Galván.

Esto, con sustento en los testimonios ante jueces y ministerios públicos de los involucrados con las dos tropas de élite en la Fuerza Civil: el Grupo de Reacción y Los Fieles.

Según la Fiscalía, el modo de operación de dicha corporación ante sospechosos de participar con la delincuencia es el mismo en casi todos los casos: los elementos de Fuerza Civil detectaban a hombres o mujeres jóvenes sospechosos, los detenían, interrogaban y revisaban sus teléfonos.

Acto seguido, los policías solicitaron 'refuerzos' y estos los proporcionan Los Fieles, al servicio de los mandos altos de la Secretaría de Seguridad Pública.

'Los Fieles', según la teoría del caso de la Fiscalía a cargo de Jorge Winckler, trasladaban a los detenidos al puente del distribuidor vial de Las Trancas, en donde los entregaban a células de la delincuencia organizada o procedían con la desaparición de los sospechosos.

Las investigaciones de la Fiscalía se extendieron a todo el primer círculo de la SSP en tiempos de Javier Duarte de Ochoa y el ente investigador consiguió órdenes de aprehensión contra el exsecretario Arturo 'N'; Roberto 'N', ex director de la Fuerza Civil, ambos actualmente en libertad tras conseguir una modificación de su medida cautelar, así como contra Óscar 'N', exdirector de Prevención y Reinserción Social.

Sin embargo, a diferencia de los demás mandos policiacos, José Nabor consiguió evitar pisar la cárcel, y con el amparo continuará de cerca el proceso pero en libertad.

Lo anterior, aún con lo contenido en la carpeta de investigación 011/2017, en donde se documentan 124 expedientes relacionados con las desapariciones de 202 personas durante el ejercicio de Javier Duarte.

15 de los desaparecidos se relacionan directamente a las órdenes directas de la cúpula de la Secretaría de Seguridad Pública, entre estos José Nabor 'N', Arturo 'N'; Óscar 'N', de la DGPRS y Roberto 'N', de la Fuerza Civil.

Según la Fiscalía la Fuerza de Reacción de la División de Policía Estatal respondía solo a los jefes de la SSP.

"El agrupamiento Fuerza de Reacción, tuvo como objetivo e instrucción detectar, detener y obtener información de personas que fueran sospechosas de participar con la delincuencia organizada. La obtención de información, se llevaba a cabo mediando tortura e, incluso, en algunos casos, el abuso sexual", indica el expediente.

Una vez que el agrupamiento Fuerza de Reacción obtenía información, no ponía a disposición de las autoridades competentes a los detenidos, sino que reportaba a sus superiores, quienes en cumplimiento a la política ilegal, en los 15 casos que se acreditan, dieron la instrucción de entregar a los detenidos a la Fuerza Especial de la Secretaría de Seguridad Pública del Estado, al mando de Roberto “N”.

Este segundo grupo, recibía a las víctimas y las trasladaba a la Academia de Policía Estatal, ubicada en el Lencero, actualmente el CEIS, donde las torturaba, obtenían información y después, las personas desaparecían.

LOS DESAPARECIDOS

Al último jefe policiaco durante el Duartismo se le adjudican de manera directa las desapariciones de al menos siete personas, capturadas por el Grupo de Reacción, unidad de la Fuerza Civil con la misión de rastrear e investigar a posibles informantes -'halcones'- al servicio del crimen, principalmente "Los Zetas" para luego proceder con la desaparición de cualquier sospechoso.

Entre ellos destacan José Leal Amaro y Liberio Hoyos Castañeda, ambos de 20 de años de edad, desaparecidos el día 14 de mayo de 2013 por la tropa de élite de la SSP.

Esa fecha, 14 elementos intervinieron a los dos muchachos en la carretera Jilotepec-Naolinco, en el municipio de Coacoatzintla, a veinte minutos de Xalapa.

De acuerdo con la Fiscalía General de Veracruz, esa noche dos patrullas, la 1800 y la 1408, intervinieron a José y Liberio.

En el 'operativo' participaron Norberto Sánchez Benítez, Alberto Neri Campos, Martín Castillo Hernández, Claudio Alvarado Ramos, Crescenciano Vega Domingo, Nicanor Ixmatlahua Xotlanihua, Evaristo Sánchez Alarcón, William López de los Santos, Óscar Paul Mendoza Ríos, Francisco Méndez Flores, Domingo Santiago Santiago, Darío Arroyo Elizondo e Iván de Jesús Antonio Cruz; todos bajo las órdenes de Silviano Martínez Rivera.

Los uniformados revisaron los celulares de José Leal y Liberio Hoyos y la tropa acusó a los muchachos de 'halconear' para Los Zetas. Minutos más tarde acudieron fuerzas especiales a bordo de las unidades 1995, 1996 y 1726. De los dos jóvenes no volvió a saberse nada.

A José Nabor igual se le relaciona con las desapariciones de Alberto Huerta Acosta, de 23 años y José Ulises Martínez, de 30, ocurridas el 30 de abril de 2016.

En el caso de Alberto Huerta, la Fuerza de Reacción lo abordó en la colonia Unidad del Bosque, cerca de la Secretaría de Finanzas y Planeación (Sefiplan), y al revisar los policías el teléfono del muchacho, detectaron mensajes alusivos a movimientos policiales. El joven admitió 'halconear' para Los Zetas y por lo anterior, quedó detenido por la tropa de élite.

Nabor 'N' fue enterado de inmediato y el jefe policíaco ordenó enviar a Alberto Huerta al "mismo punto", es decir el distribuidor vial de Las Trancas, de dónde las unidades o bien entregaban a los incriminados a la delincuencia o los desaparecían.

La acción la cumplieron los elementos a bordo de las unidades 1999 y 1979.

José Ulises Martínez corrió igual suerte, al ser intervenido igual en las cercanías de Sefiplan. Cómo en anteriores detenciones, el teléfono del muchacho lo delató de trabajar para el crimen y fue asegurado por las unidades 1993 y 1976.

Incluso la brigada letal intervino a Héctor Jesús Hoyos Barradas, de apenas 16 años, en la congregación El Rosario de Rafael Lucio, e igual los uniformados le detectaron mensajes alusivos a 'Los Zetas'. Igualmente se reportó a Nabor 'N', quien dispuso el mismo fin para Hoyos Barradas.

El 23 de junio de 2013, fueron privados de su libertad Carlos Alberto Ruiz Barbadillo y Humberto Ruiz Arcos por el grupo de reacción, integrado por 14 elementos estatales, a cargo del comandante “Cyber”, Alejandro Trujillo Rivera.

Ruiz Bobadillo, conducía el taxi con número económico 5874, y fue cercado por tres patrullas: 426, 1800 y 1408, pues de acuerdo con las bitácoras policiales, conducía “con actitud sospechosa”.

Ambas personas, según las bitácoras de la SSP, confesaron pertenecer al grupo de “Los Zetas”; Carlos Alberto fue identificado como “el central”, mientras que Humberto confesó que estaba aprendiendo a desempeñase como “halcón”.

En todos los casos, los subalternos reportaron a José Nabor cada una de las detenciones y el funcionario dispuso de cómo proceder.

ygr