Veracruz, Ver. Son las nueve de la mañana y centenares de personas comienzan a concentrarse. Niños, adolescentes, adultos y personas de más avanzada edad están listos.
Con gorras, sombreros, sombrillas o abanicos, intentan cubrirse de los rayos del sol. Al escuchar una voz femenina y por instrucción de los más grandes de edad, poco a poco, todos comienzan a guardar silencio.
“Compañeros, vamos a caminar, vamos a exigir nuestros derechos, vamos a recordar estos tres años, no vamos a permitir que se cometan injusticias, vamos a luchar juntos y organizados”.
“Hay que ir en orden, que se demuestre la unidad y el respeto”, “La justicia federal nos concedió el amparo”, dijo Angélica Navarrete Mendoza, secretaria general del Sindicato Teniente José Azueta desde la entrada de un inmueble casi abandonado: La oficina principal de Sistema de Agua y Saneamiento Metropolitano (SAS).
Luego de que en 2016 fuera despedida toda la plantilla laboral de SAS, (cerca de mil 589 personas) esta mañana continuó en las calles la lucha contra los patrones que declararon la empresa en quiebra.
“Son alrededor de mil quinientos millones de pesos que nos deben de salarios caídos, en prestaciones devengadas, e incluso el fondo de ahorro que nos robaron” dijo la señora Angélica.
¡Sindicato unido jamás será vencido!
Comienza la caminata sobre la avenida Cristóbal Colón, se escuchan consignas. ¡Sindicato unido jamás será vencido!, ¡Ganaremos esta lucha, cueste lo que cueste!
Padres de familia con niños en los hombros, mujeres intentando cubrirse del sol ya forman parte de la escena. Extrabajadores sindicalizados y otros más de la plantilla de confianza desfilan mano a mano en la lucha por sus derechos con la ayuda de sus familias.
Don David, con una sombrilla en mano, cubre a su esposa del sol mientras cuenta cómo ha sido el estar en paro por tres años:
“Nos despidieron sin justificación ni nada, sin un quinto y para darle de comer a gente que no son de aquí, esa es la lucha que nosotros tenemos, no estoy enojado ni estoy triste, estoy contento porque estamos luchando
El gobierno que va entrando dijo que nos va a echar la mano, nos va a ayudar, pero apenas acaba de entrar él y tenemos que darle tiempo para que haga su trabajo, tenemos esperanza que él nos ayude, que él vea todo y resuelva todo este problema”.
En contraparte, la secretaria general comentó que el presidente municipal de Veracruz, Fernando Yunes Márquez aseguró tener la intención de arreglar el problema antes de que terminara su administración, sin embargo, a través de los medios de comunicación declara lo contrario y acusa a los trabajadores por el cierre de SAS.
“Los trabajadores estamos dispuestos a llegar a un acuerdo, todavía es tiempo de llegar a un acuerdo en lo que nos deben y que el sistema vuelva a ser del municipio”.
En lo que caiga andamos trabajando
El contingente avanza sobre la calle Díaz Mirón cada vez más animada y gritando mucho más fuerte: ¡Estamos todos de pie, compañeros!
El señor Marco Antonio Vargas camina con dos amigos suyos, platica sobre su trabajo en SAS. Él asistió día tras día durante 25 años a la planta de agua potable con el cargo de cabo de cuadrilla.
Sacrificios muy grandes implicó el despido:
“estábamos acostumbrados a una vida digna, en lo que caiga andamos trabajando porque la mera verdad no tenemos un trabajo (…) albañilería y plomería para sacar algo”
Tres años de lucha
Conforme el grupo avanza, entre todos comienzan a darse ánimos: “Ya casi llegamos”, “Ya falta poco”. Los semblantes van cambiando, el cansancio es evidente.
La lideresa de SAS acusó a la actual empresa a cargo del agua de Veracruz y Medellín, Grupo MAS, de prestar mal servicio y abusar de los usuarios.
“Estas empresas no están haciendo nada, no tienen piedad sobre los usuarios, están mandando agua contaminada”.
También agradeció a todos por estar presentes y continuar la lucha, aseguró a todos sus agremiados que poco a poco irán avanzando con el pleito legal que hoy cumplió tres años.