PUEBLA (La Silla Rota). -"Mi director, el comandante se encuentra dormido, no se le puede molestar", contestó personal de Seguridad Municipal de San Martín Texmelucan a los familiares de Zayda Hernández de Jesús, asesinada en su casa de una puñalada en el corazón. Ellos están siendo amenazados y esa es la respuesta de la autoridad, indicaron sus asesores jurídicos.
El lunes 4 de diciembre, Zayda estaba en su domicilio junto con su hijo Jonathan. José Javier Espino tocó la puerta, ingresó y apuñaló a la occisa y a su amigo, quien ahora permanece en estado de coma en un hospital de la Ciudad de México.
Tras asesinar a Zayra de 55 años y apuñalar en el hígado, pulmón y cabeza a Jonathan, el probable responsable de los hechos huyó de la casa, según se observa en un vídeo de seguridad de la colonia, al que tuvo acceso La Silla Rota.
Tras la agresión, Jonathan salió de su casa a pedir auxilio en la tienda ubicada a un costado y tras él, su agresor corrió en sentido contrario. Desde ese día, está desaparecido, pero ninguna autoridad ha ordenado su captura.
Jonathan de 25 años fue atendido en el Hospital de San Martín Texmelucan y después trasladado al Hospital Betanea, dónde su familia adeuda 346 mil pesos por las operaciones que le practicaron. Sin embargo, ante la gravedad de su salud, ahora está siendo atendido en un hospital de la Ciudad de México.
Las pruebas
Los asesores de la familia indicaron que desconocen porqué si la Fiscalía General del Estado cuenta con los vídeos y testimonios que responsabilizan del feminicidio de Zayda y la tentativa de homicidio de Jonathan a Javier Espino, ni una orden de aprehensión han girado.
Zayda era presidenta de los colonos y mandó varios oficios al ayuntamiento de San Martín Texmelucan para que reforzarán la seguridad en su fraccionamiento. Ahora, está muerta y es parte del caso centenar de feminicidios que se han contabilizado este año en el estado de Puebla.
Los vecinos cuentan con sistema de vídeo grabaciones y al menos una de las cintas que permiten esclarecer los hechos, ya le fue proporcionada al personal de la FGE.
Jonathan, al ser atendido por el paramédico, le dijo quién era el responsable del asesinato de su madre y señaló a José Javier Espino.
El vídeo, las entrevistas al paramédico y policías municipales no han sido suficientes elementos para que la FGE al menos responsabilice a José Javier Espino, de 25 años, de los hechos del pasado 4 de diciembre, explicaron familiares de las víctimas.
Las mentiras
En entrevista, los asesores de la familia también rechazaron que el probable responsable haya sido pareja de la mujer asesinada, como inicialmente se mencionó en los medios de comunicación.
El agresor era amigo de Jonathan, quien también tenía amistad con Max Ramírez Jiménez, primo del probable responsable y sujeto que se ha dedicado a obstaculizar la ley con versiones falsas que se contraponen a lo que se observa en las cintas de seguridad.
La familia de las víctimas aseguró que hay testimonios para probar que los primos Max Ramirez y José Javier el día de los hechos habían estado tomando licor horas antes e ingiriendo drogas.
Exigen protección
Debido a que la casa donde se cometieron los asesinatos está sellada, la Fiscalía General del Estado giró oficio a la autoridad municipal para resguardar el inmueble.
Al no haber una respuesta, está semana se acercaron a la comandancia de Policía Municipal donde les respondieron minutos antes de las nueve de la noche: "Mi director, el comandante se encuentra dormido, no se le puede molestar, regrese si quiere en una hora y veremos si le puede ayudar".
La familia manifestó indignación por la lentitud de la Fiscalía para detener al probable responsable y por la respuesta del personal de la policía municipal, quién cuida el sueño de Sinué Jerónimo León Sanchez, Director de Seguridad Pública.
Los hechos que constan en la carpeta de investigación 19694/2017 exigen se investiguen a fondo para que el responsable del feminicidio sea sentenciado y también responda por Jonathan, quien confían salga del estado de coma y recupere su vida.