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De Monse a Karla: Impunidad reina en agresiones a mujeres de Veracruz

La violencia contra las mujeres se convirtió en un hecho que impera en la sociedad, en La Silla Rota Veracruz conversamos con especialistas sobre el tema

Escrito en VERACRUZ el

La historia de Karla Guadalupe, a quien, según sus vecinos, su exnovio Ernesto T. le asestó seis martillazos en el cráneo, se suma a los casos de violencia contra Monserrat Bendimes y Martha Yolanda, registrados en 2021 en la zona conurbada Veracruz-Boca del Río. Los tres están impunes.

El presunto agresor de Karla, quien se encuentra en grave en terapia intensiva en el Hospital de Alta Especialidad de Veracruz (HAEV), es prófugo de la justicia, al igual que Marlon Botas Fuente, a quien se le señala como responsable de la golpiza que mató a Monserrat Bendimes el pasado abril.

Solo en el caso de Martha Yolanda, quien fue asesinada a puñaladas a pocos metros del centro de Boca del Río, existe un detenido: Iván “N”, su expareja, a quien un juez le dictó dos años de prisión preventiva por su presunta responsabilidad en el feminicidio.

La impunidad reina como factor en los casos de Monserrat, Martha Yolanda y Karla Guadalupe, así como en el 90 por ciento de los femicidios o tentativas de feminicidios registrados en el estado de Veracruz. 

De acuerdo con el Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP), solo el 13 por ciento de los más de 400 feminicidios investigados entre 2015 y 2019 por la Fiscalía General del Estado (FGE) concluyeron en una sentencia.

Según Salma Teodosio Viveros, académica y doctoranda en Derecho Público por la Universidad Veracruzana (UV), la impunidad caracteriza a los feminicidios registrados en Veracruz debido a descuidos del órgano impartidor de justicia que derivan en errores procesales.

La también columnista en La Silla Rota Veracruz dijo que los errores procesales ocasionan que los presuntos feminicidas y/o agresores queden en libertad y aprovechen para huir, por lo que las autoridades ya no los encuentran cuando vuelven a imputarles los delitos.

“Nuestro sistema de justicia, muy endeble, muy deficiente, no se compromete totalmente después a encontrar a los agresores y agresoras que ese mismo sistema dejó salir”, señaló.

Sobre el caso de Martha Yolanda, en el que hay un detenido, la vocera del colectivo feminista “Las Brujas del Mar”, Arussi Unda, indicó que el presunto feminicida fue detenido por ciudadanos y no por las autoridades.

“Fue lo que facilitó de alguna forma u otra que este señor esté en este momento esté detenido, si no hubiese sido así, probablemente sería otro más que está prófugo de la justicia.

Definitivamente el clima de impunidad que hay en el país y en Veracruz es caldo de cultivo para que los hombres entiendan que no haya una repercusión a sus actos”, opinó.

Los casos de violencia feminicida registrados en la conurbación contrastran: mientras el presunto feminicida de Monse Bendimes se desenvuelve en un sector privilegiado de Boca del Río, los agresores de Martha Yolanda y Karla pertenecen a estratos sociales más bajos.

Para Arussi Unda, la violencia feminicida no distingue clases sociales. La activista consideró que, en la mayoría de los casos, también existen obstáculos para que las mujeres accedan a la justicia a pesar de que cuentan con los recursos económicos para tener defensoría legal.

FALTA PERSPECTIVA DE GÉNERO EN ÓRGANOS IMPARTIDORES DE JUSTICIA

Ambas expertas en materia de violencia de género coincidieron en que las dependencias encargas de impartir y procurar justicia en el estado de Veracruz carecen de perspectiva género, aun cuando mujeres los encabezan.

“El que haya una mujer en una fiscalía, el que haya una jueza no implica que va a haber un mejor funcionamiento si no está capacitada”, dijo Salma Teodosio.

Para la académica, es necesario que los titulares de estas dependencias, hombres o mujeres, y quienes estén detrás de ellos, estén capacitados para realizar sus funciones con perspectiva de género.

“Se necesita una capacitación del cuerpo policíaco; el cuerpo policíaco es el cochinero más grande, que provoca los problemas más grandes procesales, el acceso a la justicia de todas las víctimas, porque son el primer contacto”, declaró.

De acuerdo con Teodosio Viveros, los titulares de órganos impartidores de justicia deben procurar que los policías, quienes son el primer contacto, estén capacitados en materia de perspectiva de género, para evitar errores que generen impunidad en casos de feminicidios o agresiones. 

Aun cuando en Veracruz se presume perspectiva de género, Arussi Unda consideró que la llegada de Verónica Hernández Giadáns a la Fiscalía General del Estado (FGE) no significó un cambio en el acceso de las mujeres a la justicia.

“La situación es poner a una mujer como fiscal, no garantiza que entonces la impartición de justicia tenga una perspectiva feminista o que se haga pensando en las mujeres”, expresó.

MONSE, MARTHA YOLANDA Y KARLA, HISTORIAS QUE CIMBRARON A VERACRUZ

La joven Montserrat Bendimes Roldán murió el pasado 23 de abril en una clínica de Boca del Río, donde permanecía internada debido a las lesiones que presuntamente su novio Marlon Botas Fuentes le causó una semana antes.

Monse Bendimes, agredida el 17 de abril, sufrió fracturas en el cráneo, la columna y lesiones en otras partes del cuerpo por los golpes que recibió y que le causaron muerte cerebral a los pocos minutos de la agresión.

Su feminicidio sigue impune, pues Marlon Botas Fuentes se encuentra prófugo de la justicia, a pesar de que la Fiscalía General del Estado (FGE) ofreció una recompensa de 250 mil pesos a quien dé información sobre su paradero.

El pasado 9 de agosto, Martha Yolanda, de 34 años, fue asesinada a puñaladas por su expareja, Iván N, a unos pasos de la Unidad Deportiva Hugo Sánchez del municipio de Boca del Río. Aunque el presunto feminicida intentó huir, fue detenido por vecinos que atestiguaron el asesinato.

Un juez de control dictó dos años de prisión preventiva en contra de Iván N, mientras se investiga su presunta responsabilidad en el feminicidio de Martha Yolanda, quien recibió tres puñaladas en el tórax, el cuello y la muñeca izquierda.

La agresión más reciente se registró el lunes 30 de agosto en una casa ubicada en el callejón Manuel Contreras, de la colonia Zaragoza, en el puerto de Veracruz, cuando la joven Karla P. fue agredida a martillazos presuntamente por su expareja Ernesto T.

Karla ingresó con traumatismo craneoencefálico al área de terapia intensiva del Hospital de Alta Especialidad de Veracruz (HAEV), donde lucha por su vida. El presunto agresor se encuentra prófugo de la justicia y es buscado en redes sociales.


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