“Cuesta mucho trabajo juntar el dinero”, dijo María Cristina Villalvazo, refiriéndose al pago del predial que realizó el 5 de enero en las instalaciones del Ayuntamiento de Veracruz, ya que para pagarlo aseguró que tuvo que ahorrar una parte de su sueldo.
A sus 72 años trabaja para cubrir sus necesidades, todos los días se ocupa limpiando casas, hace un año dejó de trabajar por miedo a contagiarse de la covid-19, pero volvió a retomarlo tras recibir la vacuna.
“No me enferme del covid porque no salía, con la ayuda del gobierno (el apoyo para adultos mayores) me la fui sobrellevando, hay que ir juntando para tener los beneficios”, dijo.
María Cristina aseguró que durante todo el año que estuvo sin laborar, por lo que subsistió por medio del apoyo de 60 y más que da el Gobierno Federal, pues no cuenta con ningún otros ingresos.
De acuerdo con el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), en 2020 en México había 15.1 millón de personas de 60 años o más, los cuales representan un total de 12 por ciento de la población.
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En el 2021, la tasa de actividad económica entre los adultos mayores como María fue de 29 por ciento, según la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo (ENOE).
La participación económica de los adultos mayores va disminuyendo conforme avanza la edad, pasa de 39 por ciento para el grupo de 60 a 69 años a 8 por ciento entre quienes tienen 80 años y más.
María forma parte de grupo de los adultos mayores que tiene que trabajar para pagar sus servicios como luz, agua, predial, comida y medicamentos.
Aunque en el caso del predial para María y otros adultos mayores el municipio de Veracruz aplicó un descuento, para los otros servicios que necesita no, por lo que debe de administrar los 250 pesos que gana al día para cubrir todas esas necesidades.
Inflación aprieta cinturón para adultos mayores y pensión no ayuda mucho
De acuerdo con el presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, en el país nueve millones 311 mil 834 adultos mayores son beneficiados con la pensión de la tercera edad.
Son tres mil 100 pesos, los que los adultos mayores reciben como apoyo por parte del Gobierno Federal, una ayuda que, aunque en los últimos años tuvo un aumento, es insuficiente, aseguró María.
Aunado a esto se suma el aumento de precios de los productos de la canasta básica debido a la inflación, la cual cerró en 7.36 por ciento en 2021, algo que no se había registrado en 20 años, según el Inegi.
Productos como el arroz, frijol, aceites, pan, azúcar, huevo y la tortilla tuvieron un aumento del 20 por ciento, de acuerdo a comerciantes.
Actualmente el frijol en 22 pesos a inicios rondaba los 14.5 pesos; el arroz estaba en 22.5 y ahora en 38.5; el kilogramo de azúcar estaba en 16.5 ahora está 18.50.
“Todo subió, es difícil, tenemos que ir ahorrando no queda de otra, quitándote una cosa para otras, porque todo está caro”, explicó María.
El Centro de Investigación Económica y Presupuestaria (CIEP), en su investigación “Pensión universal para adultos mayores: una revisión necesaria”, señaló que es una “pensión que ayuda, pero que no alcanza”.
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El estudio mencionó que, entre 2014 y 2018 el programa mantuvo una cifra de 580 pesos mensuales, para 2019 hubo un aumento de un mil 275 pesos, pero desde su creación, en el 2013 estas cantidades no son suficientes para cubrir todos los gastos de los adultos mayores.
En el 2019 la pensión adquirió un carácter universal como una transferencia incondicional que aún en 2021 no alcanza a cubrir la canasta alimentaria urbana, señaló el documento.
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De acuerdo con el CIEP, la cantidad que se otorga de pensión solo cubre la línea de bienestar mínima rural y solo 80 por ciento de la urbana. En el caso de la canasta básica en la línea rural cubre 62 por ciento y 42 en la urbana.
Para el Banco Mundial la canasta básica para considerar a un hogar pobre en México es de cuatro mil 322.70 al mes.
Mientras que la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL) es de nueve mil 172.30 y en tanto que para el CONEVAL es de 11 mil 290.80 pesos.
Al costo de la canasta básica se le suman los servicios de luz, agua, predial y médicos, en todos los casos es prácticamente imposible que un adulto mayor como lo es María puedan cubrir todos esos gastos, ya sea trabajando o con la pensión.