La mayoría de las veces, es más seguro pasar una tarjeta de crédito que una tarjeta de débito en la caja registradora. Esto se debe a que, a diferencia de las tarjetas de cajero automático, las tarjetas de crédito ofrecen protecciones clave contra cargos fraudulentos y varias veces contra compras dañadas.
Aún así, muchas personas creen que elegir el débito en lugar del crédito es la apuesta más segura. Esta creencia es especialmente cierta para los millennials. Pero incluso si eliges ceñirte a tu tarjeta de débito para las compras diarias, hay algunas situaciones en las que quizás quieras pensarlo dos veces.
De acuerdo con Greg McBride, analista financiero jefe de Bankrate.com, hay momentos en los que es más importante considerar el uso de crédito sobre débito.
COMPRAS COSTOSAS
Uno de los inconvenientes de las tarjetas de débito es que esencialmente funcionan como efectivo. Si se realizan cargos fraudulentos, podría ser responsable de una gran cantidad: desde 500 pesos hasta todo en lo que esté en su cuenta.
Entonces, cuando compra artículos costosos, como un sofá nuevo o una computadora portátil, usar una tarjeta de crédito suele ser la opción más segura, gracias a sus ventajas secretas.
Incluso, el uso de tarjetas de débito para compras de boletos más grandes puede ser un inconveniente porque no tiene la misma protección de compra que tienen las tarjetas de crédito. Por ejemplo, muchas tarjetas de crédito ofrecen la posibilidad de obtener un reembolso en algunos casos.
Algunas compañías de tarjetas de crédito también lo ayudarán si una compra se daña.
Además, que al hacer compras grandes puedes generar puntos, lo cual pueden ser útiles para hacer una pequeña compra después como una salida al cine.
CUANDO VIAJAS
Al alquilar un automóvil o reservar un hotel, hay que tener cuidado de no cargar el gasto a la tarjeta de débito. A menudo, este tipo de lugares retienen la tarjeta como seguro de que pagará la factura.
Con una tarjeta de débito, eso significa que se reduce la cantidad disponible en tu cuenta. Por lo tanto, si no está prestando atención a tu saldo durante las vacaciones, puede ser fácil gastar más de lo que desea, o más de lo que tiene. O bien, quedar corto para los gustos que desea.
De la misma manera, cuando alquila un automóvil, pueden retener un porcentaje en su cuenta como seguro, por lo que básicamente tiene esa cantidad en el limbo.
Eso podría desencadenar cargos por sobregiros para otros pagos que ya están programados. Si bien es posible monitorear cuidadosamente su cuenta, también es fácil de olvidar.
Con el uso de una tarjeta de crédito en su lugar generalmente puede eliminar ese estrés. Sin embargo, las tarjetas de crédito vienen con su propio conjunto de advertencias, por lo que es mejor leer las letras chiquitas para evitar un gasto excesivo.
Y si viaja en avión internacional, hay que verificar primero si la tarjeta cobra tarifas de transacción en el extranjero y qué beneficios puede obtener con el uso del crédito, como millas o meses sin intereses.