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Asesinato en un antro de la Condesa: otro caso de narco en la CDMX

El sábado pasado un joven fue asesinado en el bar Dembow; la escena fue muy similar al homicidio que 5 años atrás desató el caso Heaven

Escrito en ESPECIALES LSR el

Dos crímenes ocurrieron afuera del mismo bar de la Condesa, pero con cinco años de diferencia entre uno y otro. Una pelea entre narcomenudistas es la razón en ambos.

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El sábado pasado, dos sicarios mataron a tiros a un adolescente de 16 años de edad que había estado en el bar Dembow. 

Cinco años atrás, el 24 de mayo de 2013, afuera del mismo centro nocturno, que en ese entonces se llamaba Black, fue asesinado Horacio Vite Ángel, un dealer harto conocido en la zona.

Según el expediente CUH-2/UI-2C/D/2539/04-2018, abierto en la Procuraduría de Justicia de la Ciudad de México, el menor de edad se llamaba Martín Montalvo Suasteguí.

Fue ultimado dentro de un Audi A1, estacionado en la esquina de Tamaulipas y Mexicali. En este mismo cruce fue asesinado Vite Ángel.

De hecho, hay un par de metros de distancia entre donde quedaron los cuerpos; Vite estaba tendido sobre una jardinera, mientras Martín quedó en el asiento del conductor del A1.

La falta de una estrategia efectiva contra el narcoemnudeo, por parte de las autoridades policiacas y gubernamentales de la Capital, se vio exhibida con este nuevo crimen, el cual parece una calca del de 2013.

De acuerdo con lo establecido en la carpeta de la PGJ, Martín estaba en el Dembow, aparentemente ofreciendo droga.

Cinco individuos se presentaron al lugar y sacaron a golpes a una pareja, a la que dispararon. No obstante, solos los lesionaron y minutos más tarde fueron capturados por oficiales de la Policía.

Al ver lo sucedido, Martín tomó las llaves de un A1 que tenía un valet parking, pero apenas subió al coche cuando fue alcanzado por una seguidilla de balazos.

Dos individuos lo habían estado “cazando”; minutos antes estacionaron una camioneta Jeep Liberty a unos metros del Audi, y cuando lo vieron subirse al automóvil corrieron hacia él para abrir fuego.

Todo fue videograbado por cámaras del C5 y ahora forma parte de las investigaciones.

Algo muy similar ocurrió en 2013. Horacio Vite arribó al mismo bar, entonces denominado Black y pronto se vio rodeado por una decena de hombres.

Eran pistoleros de la Unión Tepito que tenían la orden de ejecutarlo. Así lo hicieron minutos después de sacarlo del lugar.

Este homicidio desató la ira de los cabecillas del grupo delincuencial la Unión Insurgentes, a la que pertenecía Vite. Por eso ordenaron el secuestro y asesinato de 13 tepiteños que estaban en el after Heaven, el 26 de mayo de ese año.

Detrás de ambos casos está la misma organización delictiva: la Unión Insurgentes. 

Fotografías obtenidas por La Silla Rota, revelan que dentro del Dembow había cajas con pastillas y medicamentos usados para cortar cocaína y mezclar con bebidas alcohólicas.

Es decir, el bar solamente cambió de razón social, reabrió a finales de febrero de este año, luego de estar cerrado por el crimen de 2013, pero continuó siendo guarida de dealers.

Desde ese año a las autoridades les advirtieron que la Roma Condesa era un nido delincuencial, pero se enfocaron en detener y enjuiciar a los responsables de matar a Vite Ángel, así como sus cómplices de la U Insurgentes, pero la droga continuó fluyendo.

Con la llegada del nuevo gerente, coincidió también Horacio Vite, al que conocía solo como ‘El Chaparro’, del que sabía vendía drogas en el Heaven, diciendo que pertenecía a la organización denominada la ‘U’, dedicada a la venta de droga en diferentes antros.

Estaban el Cíngaro, el Fever, el AM, el Living, el IU y el Black, y que por dicho de meseros y de los gerentes de, por ejemplo, el Black, como era Pepe Zetina o del Fever, Arturo Morales alias ‘El Negro’, que los de la U ya los tenían hartos, pues imponían la venta de droga en los antros y golpeaban a los clientes”, relató José de Jesús Carmona Aiza, sentenciado por el caso Heaven y quien fuera publirelacionista de varios centros nocturnos en la Roma Condesa hasta 2013.

Su testificación quedó asentada en el expediente judicial 181/2013; fue condenado a 520 años de prisión en 2015.

A pesar de todo lo ocurrido en ese sangriento 2013, la vida nocturna y sus peligros siguieron siendo comunes en la Roma Condesa, pues se registraron 5 asesinatos y atentados contra dueños de diferentes antros, como el Dussel y el Bar Terraza.

El 30 de diciembre de 2016 fue ultimado el propietario de éste último, asentado en el 90 de Oaxaca. Se trata de Raymundo Mireles Rivera, quien intentó denunciar a la U Insurgentes e incluso encaró a un par de dealers la noche de su muerte.

En el Dussel, ubicado en el 39 de Saltillo, pasaron 3 balaceras entre enero y noviembre de 2016. Su entonces dueño, Maneli Ríos, sufrió un ataque a tiros del que salió con heridas.

Para marzo de 2017, el Dussel siguió manteniendo su razón social y nuevamente estuvo bajo los reflectores, cuando su administrador, Bryan Giovanni Rodríguez Jiménez “El Tiburón”, fue agredido a tiros en un restaurante de la colonia Santa María la Ribera.

El joven murió entre las mesas del lugar, y su acompañante, Cristian Omar Larios Tierrablanca “El Kikín” apareció sin vida al otro día, envuelto en cobijas en Tepito.

Las investigaciones que arrojaron los casos del Dussel, el Bar Terraza, así como crímenes que tuvieron lugar en el Bar Frida Roma y el Gorilaz City Roma develaron que, a pesar de las capturas de integrantes de la U Insurgentes anunciadas por el Gobierno de Miguel Ángel Mancera, a raíz del caso Black y Heaven, esta banda sigue operando.

Están en guerra contra la Unión Tepito y más recientemente contra el grupo criminal de Roberto Moyado Esparza “El Betito”, cuya base de operaciones es la Colonia Guerrero y el Centro Histórico.

Desde 2013, según la PGJ, ha habido 38 personas de la U Insurgentes encarceladas. Pese a ello, su líder máximo, Edwin Agustín Cabrera Jiménez “El Antuán”, sigue prófugo.

Su segundo a bordo, Felipe Chávez Cabrera “El Damián”, ha sido internado en prisión, liberado y otra vez puesto tras las rejas. Desde el Reclusorio Norte presuntamente continúa al frente de la U y del control sobre la distribución de drogas en Roma Condesa.

Pasó en 2013 con Horacio Vite y las consecuencias fueron 13 secuestros que marcaron un precedente en Ciudad de México.

Pasó este sábado con Martín Montalvo Suasteguí, por las mismas razones y en el mismo lugar. ¿Habrá consecuencias similares a las de 2013?

jamp